Capitulo 54

Esquivar la mirada de dos Beatles, era algo que hasta el momento nadie se atrevía a hacer. Sin embargo, allí en medio salón, rodeada de prensa y de fans, estaba Sarah, ignorando a Ringo quien la había traicionado quien sabe por cuanta vez y George, el que jamás se imagino besar. Las cosas no habian salido nada bien en el viaje a Austria, para ninguno en realidad y ahora los silencios se hacían eternos, al igual que las verdades que aun no estaban por estallar……..

Como siempre, cuando volvían del exterior por algún proyecto, en el aeropuerto los esperaba una rueda de prensa más corta de lo pensado muchas veces. Pero allí en esa mesa frente a los micrófonos y personas de más de 30 años bien vestidos y peinados, haciendo pregunta frenéticas, no se encontraba uno de los integrantes de la banda, siendo Paul quien se había escapado con Gloria a Vienna para pasar algunos días más juntos. Esto último también llevando al límite a Sarah, que de mal humor, tratando de no hablarle a nadie excepto a Cynthia, se encontraba esperando a que todo terminara para irse a casa.

-¿Te sientes bien?. Le pregunto Cynthia preocupada, a su lado

-Sí, es solo que me duele la cabeza. Respondió la chica, cortante

-¿Es por Paul?, digo, como se fue con esa chica y no volvió para estar el día libre que le toca con Isabelle y Mía

-No es por Paul, Cyn….es por otra cosa

-Ya veo, no creo que solo por eso estuvieras así. ¿Paso algo con Ringo?

-Siempre…

Y dándose media vuelta, se fue a subir al auto que los esperaba en las afueras del lugar, para esperarlos allí. No obstante, los chicos no tardaron en terminar su entrevista y deseosos como la vez anterior que regresaron de Bahamas, estaban por llegar a su casa a dormir. Sin embargo, Sarah que planeaba irse a casa de su hermana unos días para calmarse un poco, no le dirigió ni una sola palabra a su novia, cuando este se sentó a su lado y el auto arranco, aunque este notando su silencio, decidió interrumpirlo de una vez por todas, algunos minutos después.

-No me has dicho nada desde hace días. ¿Qué demonios te pasa?

-Nada Richard, nada.

-¿Nada?, me haces mala cara cada vez que me ves, no me dices ni buenos días y haces como si no existiera. Replico Ringo desesperado, desabrochándose el cinturón

-Hubieras pensado eso antes de besarte con alguien en medio hotel. Contesto Sarah sin quitarle la vista a la ventanilla

-¿Disculpa?

-Si Richard, lo que oyes, alguien te vio y me lo conto. Respondió Sarah finalmente mirándolo a los ojos, con mucho desprecio

-¿Y porque no me lo contaste?

-Porque no quería hacerlo mientras trabajabas y en frente de todo el mundo

-Pues te informo que eso es una vil mentira Sarah

-¿En serio?......no te creo

-¿Y por qué no?, ¿tienes pruebas?

-No, pero tu mirada me lo dice todo

Y en silencio, siguió el camino, sin ninguno cruzarse la mirada o alguna palabra. Si, Ringo si se había besado con una chica en Austria pero no de la manera en que Sarah pensaba y frustrado de ver como ella lo conocía tanto, tanto que no lo dejaba ni explicarle nada, mantuvo los brazos cruzados por la indignación, hasta llegar a casa, donde entro en ella en el mismo silencio de antes, hasta que siguió a su novia y la vio empacar ropa limpia en una nueva maleta…

-¿Qué haces?. Le pregunto molesto, y casi histérico

-Me voy a donde Mía, a visitarla. Respondió la chica con naturalidad, encogiendo los hombros al mismo tiempo

-Sarah…..no te vayas, sé que no te vas solo para visitar a tu hermana

-Mira Richard, me canse de todo esto, no puedo sentarme y esperar a que me seas infiel en cada viaje que haces, creo que esto no va a funcionar

-¿Qué?

-Lo que escuchas, creo que deberíamos de darnos un tiempo

-Ni siquiera me has dado la oportunidad de explicarte bien lo que paso

-No, yo ya sé que paso, no hacen falta explicaciones con excusas en el medio

No entendiendo muy bien porque ella hacia todo eso, si poco antes estaban tan bien se quedo viendo con los ojos vidriosos, como ella hacia una pequeña maleta lo más rápido que podía y luego salía de la habitación….

-Te amo Sarah

-Yo también Richard. Replico Sarah en el pie de las escaleras, antes de irse definitivamente

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Harta de estar en esa vida que ya no le resultaba nada bueno, Cynthia a causa de eso, comenzó a pensar en un plan para separarse lo más pronto posible, recordando ahora a Daniel y los días que no tenia de verlo, con una sonrisa soñadora que John no tardo en ver…

-¿Por qué estas sonriendo así?. Le pregunto en son de burla con su típica sonrisa cínica

Pero Cynthia no le respondió e queriendo ignorarlo por completo, puso a Julian en sus brazos y se lo llevo a su habitación, para estar un rato a solas con él. En esos momentos se encontraba muy confundida, amaba muchísimo a John y estaba segura que lo haría el resto de su vida, pero también estaba comenzando a sentir cosas por Daniel, el hombre que parecía estar muy interesado en ella y que le prometía cambiar su vida, así que después de pasarle unos juguetes a su hijo, se sentó en su pequeña cama, pensativa como era natural en los últimos días. Sin embargo, John preocupado y curioso de verla tan indiferente con el últimamente, no dudo en seguirla y pararse en el umbral de la puerta, analizándola con la mirada callado, hasta que ella se dio cuenta de su presencia…

-¿Qué tienes con ese tipo?. Le pregunto nuevamente, adivinando el porqué estaba así

-¿Qué?

-Cynthia tú no me engañas, algo te traes con el tipo que encontré aquí la otra vez y tuve que golpear

-Tú también te traes cosas con muchas mujeres y no pregunto

-No quiero hablar de ese tema Cyn

-Yo tampoco

-¿Quieres el divorcio?, yo también, pero necesito tiempo y tu igual

El teléfono que no estaba muy lejos de allí, fue lo que se encontró John en su camino, mientras sonaba sin parar y este lo contestaba un poco fastidiado, escuchando una voz al otro lado de la línea, que se le hizo vagamente conocida de inmediato….

-¿Esta Cynthia?. Escucho que preguntaba un hombre insistentemente

-Daniel, no Cyn no está, soy John

-Ah John….

Sin embargo, Cynthia que había escuchado esa pequeña conversación entre ambos cuando iba saliendo de la habitación, no pudo evitar prácticamente correr hacia el teléfono y arrebatárselo a John para poder hablar con el chico. Era extraño, pero el miedo que le tenía a John años antes, se estaba desapareciendo poco a poco desde que conoció a Daniel y por eso hizo lo de antes.

-Daniel, soy Cynthia

-Cyn, pensé que no estabas…

Conteniéndose como la ultima vez, John decidió ir con su hijo, al mismo tiempo en que en su interior, quería retener a Cynthia ahí con el toda la vida y desaparecía a Daniel. Le estaban quitando a su esposas en sus narices y el siempre fue muy celoso. ¿Por qué ahora se estaba comportando así?, ¿se estaba cansando de todo acaso?

-Necesito que me saques de aquí

-Tranquila Cyn, todo a su tiempo. Pero quiero verte, necesito hablar contigo….

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El sonido imparable de la máquina de escribir de su hermana y la voz aguda característica de una niña pequeña mientras hablaba con su padre, era exactamente lo que aturdía en esos momentos a Sarah, que no tenía mucho de haber llegado y de ser recibida por Mía, más concentrada en su libro que en la vida. Desesperándose minutos después, se levanto bruscamente, caminando hacia el escritorio de la chica para que parara de hacer eso. Necesitaba alguien con quien hablar y ella era la única…

-¿Podrías parar de escribir un momento por favor?

-¿Necesitas algo?. Pregunto Mía sin quitarle los ojos a la hoja casi en blanco que tenía en frente

-Sí, que me escuches

Lanzando un bufido de fastidio y sabiendo que lo caprichosa que era Sarah no se le iba a quitar ese día, dejo todo de lado y se sentó junto a ella en el sillón, lanzando otro bufido cuando vio que Isabelle parecía cada vez tardar más en colgar el teléfono….

-Deje a Richard

-Ya me lo dijiste

-¿Crees que hice bien?

-¿Me estas pidiendo un consejo o algo así?, porque sabes que soy la menos indicada para eso

-Si lo sé, estas casada con un hombre que en estos momentos se encuentra con una chica en Vienna y a ti no te importa. Pero eres mi amiga más cercana

-O más bien, tú ultimo recuerdo…

-También

-Mira Sarah, los chicos son así, siempre han sido unos idiotas y les encanta las chicas, no esperes que lo mujeriego que era él, se quite de la noche a la mañana

-¿Y qué podría hacer?, lo quiero pero no quiero que me sea infiel siempre y no voy a hacer lo que tú haces, es asqueroso

-No estamos hablando de mi, si no de ti. Date un tiempo con él, estoy segura que pensaras que hacer y el también

-Sí, creo que tienes razón

-Mírame a mí, soy un desastre, no tengo trabajo, Paul ya no me ama por mi culpa y soy una pésima persona, así que nunca sigas mi ejemplo

-No digas eso, eres una gran madre, si fuera así, no hubieras sobrevivido con Isabelle cuando estaban solas en París, pero sabes que sucede Mía, que ya olvidaste quien eras en Francia

-Puede ser, pero….¿crees que no quiero ver a Paul y abrazarlo?. Me duele lo que hace, pero es mejor así, yo ayer me desquite de nuevo con otro chico que conocí, es divertido, lo que realmente sucede es que en Francia eran otros tiempos…..piensa en eso Sarah, los tiempos cambian

Encendiéndose un cigarrillo y pasándole uno a Sarah, Mía se quedo allí sentada pensativa al igual que ella, hasta que escucharon como Isabelle se despedía de Paul y llegaba corriendo hacia donde ellas, anunciando algo que ninguna de las tres se imagino antes.

-Papá viene en camino….

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Dolido por la escena que había acabado de ver, George salió al pasillo con las manos sobre su rostro, escuchando como Victoria llamaba su nombre sin parar y luego se ponía en frente suyo con una sabana alrededor de su cuerpo. Tan solo cinco minutos antes, George la había descubierto en la cama con Joseph, ya que desde hacía días que estaban juntos y hasta se había quedado a dormir en su casa…….

-George, escúchame, no es lo que crees

-¿No es lo que creo?, por favor Victoria, no soy estúpido

-Ya lo sé, yo soy la estúpida

-Simplemente es…….no puedo creerlo

Con ganas de llorar, Victoria hizo ademan de abrazarlo, hasta que se vio rechazada por el, quien ya se iba de ahí, tal vez para siempre. Sin embargo, la chica no iba a permitir que se fuera sin resolver las cosas y no importándole que solo estuviera con una sabana puesta, lo siguió hasta el elevador, donde se metió con él para intentar hablarle…

-Yo no quería hacerlo, estaba drogada

-Claro, tú y tus drogas. Contesto George secamente, sin aun mirarla

-Tienes que entenderme

-¿Entender qué?, yo no he hecho nada, tú fuiste, tu lo arruinaste

-Sí, es cierto, pero no fue mi intención

-Ya no te quiero escuchar Victoria, sal de aquí

Más molesto que antes y como ella nunca lo había visto, George salió del elevador cuando este llego al primer piso, dispuesto a irse de ahí de una vez por todas. No obstante, la chica, que seguía insistiendo, esta vez lo siguió hasta la calle, donde ya el estaba abriendo la puerta de su auto……

-Te amo George

-Yo también Victoria, pero es mejor dejarlo así

Comenzando finalmente a llorar, observo al mismo tiempo, como George encendía su automóvil y se iba sin volverla a ver. No sabía bien si la había terminado o no, lo que si sabía es que había arruinado algo e ignorando las miradas confusas de la gente que pasaba a su lado, se adentro de nuevo al edificio, encontrándose con Joseph cuando entro, aun llorando….

-Lo siendo Vicky, fue mi culpa

-No….no, fue mía

-Ven no llores así

-No déjame, quiero estar sola

Sintiéndose todavía muy culpable, se puso la ropa que le faltaba e hizo lo que ella le pidió: dejarla sola. Mientras ella pensaba lo recién sucedido y lo que iría a suceder………

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Regina, era la  única a la que podía recurrir en esos momentos. Sin embargo, John nunca pensó que esa tercera visita, llegara a tanto y poniéndose sus pantalones, trato de olvidar lo que paso entre ellos esa tarde e irse. No obstante, Regina que no estaba nada arrepentida de acostarse con él, se levanto desnuda, parándose en frente suyo con una bola pequeña de plástico que John no sabía de donde había sacado….

-¿Qué es eso?

-Ten, es mía, si la tomas, ella te va a ayudar a tomar una decisión

-¿Eres bruja acaso?

-No, pero me gusta este tipo de cosas, me lo dieron cuando era niña, una mujer que si era bruja

Riendo por las cosas extrañas que ella le estaba diciendo, ignoro la bola transparente que ella seguía tendiéndole y salió de la habitación, tropezando con unos tarros de pintura que estaban en medio camino…..

-Mierda, ¿Por qué dejas eso ahí?. Le pregunto en un grito histérico, espantándola de inmediato

-Lo siento, fue sin intención

Molesto, por haberse golpeado su pie izquierdo y por todavía sentirse frustrado por lo que ocurría en su matrimonio, se recostó en el marco de una de las ventanas, viendo la calle y sintiendo como Regina se paraba a la par suya…

-No sé qué me pasa, he estado muy débil este año

-Es solo que ya estas cansado de muchas cosas y quieres cambiar algo

-Sí, quizás…

-Toma, úsala, en serio ayuda

-Si lo hace, te tachare como bruja el resto de tu vida

-No importa

Tomando la bola en sus manos, espero a que algo sucediera, hasta que un humo color rojo comenzó a surgir en sus adentros y daba vueltas lentas, mientras el miraba la escena con curiosidad y Regina sonreía un poco….

-Tuve razón, lo que necesitas es un cambio

-No entiendo, ¿Qué significa ese humo color rojo?

-Eso, que necesitas un cambio

-¿Y qué propones que haga?

-No puedo decírtelo, pero piénsalo

-¿Cynthia?, ¿mi familia?, ¿la banda?, ¿la fama?

-Ya te dije que no lo sé John, piénsalo

Pero en esos momentos no podía pensar porque no sabía bien con exactitud qué era lo que lo estaba cansando más. Así que devolviéndole la extraña cosa que lo había confundido más que antes, puso en sus brazos a Regina y la llevo de nuevo a su habitación, porque en el fondo lo único que si sabía era que quería estar con ella….

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Con cansancio y desesperación por finalmente llegar a casa, Paul se quedo viendo el paisaje en el transcurso de viaje en tren hacia Londres. Por primera vez en días estaba solo y necesitaba ver a su hija y también a Mía. Porque a pesar de todo, la extrañaba a ella también, y estaba muy arrepentido de haberla golpeado, porque era uno de sus sueños hechos realidad y tratarla de esa forma era contradictorio, aunque estaba de acuerdo con ella y la idea de no tener un matrimonio como el de la mayoría en el mundo. Por fortuna, esas cosas no dieron más vuelta en su cabeza, porque después de casi todo un día viajando, el tren arribo a la estación de trenes, donde ya un auto lo estaba esperando para llevarlo a casa. Por fin su casa, y su cama y las risas de Isabelle y los respiros pausados de Mía mientras dormía a su lado, siendo esto último lo que ocurría, cuando llego y subió despacio las escaleras, hacia su habitación. Eran casi la media noche,todas dormían y no quería hacer mucho ruido, así que dejando sus maletas en la sala y sin zapatos, entro a la recamara, donde la luz de la luna le pegaba en el rostro a su esposa y dejaba en evidencia los mechones rubios de su cabello cambiante, los mismos que él vio ondear cuando la deseaba en sus más profundos sueños después de tocar toda una noche en algún pub de Hamburgo…….

-Oh Mía, sigues siendo la misma de siempre. ¿Qué me pasa?....

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Hola chicas, ¿que cuentan?, por fin estoy de vuelta, quería publicar antes pero la semana pasada no estaba aquí en mi casa y tuve que posponer la publicación  Espero que les haya gustado este capitulo lleno de drama como siempre, me costo un poco escribirlo porque tengo todos los dedos lastimados (estoy haciendo Danza con telas y me lastimo mucho todo el cuerpo XD), pero hice el esfuerzo y aquí esta listo, muchas cosas van a ir cambiando, ya verán,  la fic por fin se puso buena y me alegro mucho de que les este gustando. Voy a aprovechar para decir unas cosas mas, la primera: bienvenida Lita y Elizabeth mis nuevas dos lectoras, que bueno que se pusieron al día tan rápido y que les guste esta cosa :), la segunda: estoy co escribiendo con Lady Mary y otras chicas, una nueva fic, para que se pasen, es esta http://irisblitzfanficbeatles.blogspot.com/, nos harían un gran favor si se pasaran y nos dijeran que les pareció  tiene una trama muy original y extraña, y se que eso puede que no les guste mucho pero delen una oportunidad ;) y bueno por ultimo un mensaje personal: Larissa no dejes de comentarme por fa, se que he actuado como una estúpida últimamente pero necesito que hagas acto de presencia aquí porque gracias a ti esta fic sigue. Y bueno ya mejor me voy, espero sus comentarios como siempre y buenas vibras para que tengan una buena semana, saludos  :)