Capitulo 53

El doble sentido con que le había dicho a Gloria, que la pasarían bien, se volvió realidad al poco tiempo, ya que al gustar de la chica de inmediato, Paul no tardo en cortejarla y lograr llevársela a la cama, ya un par de veces, mientras disfrutaba de su estancia en Obertauern con los chicos y filmaban la película. Al caer la noche, y aprovechar que la chica había sido invitada a cenar con ellos, la llego a invitar el también, pero no al comedor del hotel, si no a su habitación, donde estaban ahora conversando, acostados en la cama, viéndose a los ojos.

-Pensé que eras casado…

-Lo soy, pero Mía no está aquí, ¿o sí?

-No….¿la amas?

-Sí, siempre, pero ya no hablemos de ella, me da dolor de cabeza

El sí que dio el por respuesta, no convenció del todo a Gloria y dejando que se encendiera un cigarrillo y volviera a acomodarse, volvió a pensar en cómo preguntarle de nuevo sobre ella…

-Si la amas, ¿Por qué le eres infiel?

-Tenemos una relación sensata, y no nos preocupa este tipo de cosas, ¿entiendes?

-Ya veo. Supongo que en estos tiempos es lo mejor

-Lo es y debo darle los créditos a ella que tiene la mente muy abierta y siempre ha sido muy liberal

-¿Desde hace cuanto la conoce?

-8 años, si la memoria no me engaña

-Es mucho tiempo, ahora entiendo lo de la niña también

-Ah claro, Isabelle

Pero a Paul tampoco le apetecía hablar sobre la niña y un poco cansado de eso, se incorporo otra vez y camino hasta la ventana, donde ido se quedo viendo las montañas tapadas por la nieve y oscuridad, a la vez en que pensaba en su esposa y en lo que había pasado entre los dos, hace poco. Nunca tuvo intención de darle una bofetada y estaba muy arrepentido, más que en Bahamas cuando ella lo descubrió con aquellas chicas. Sin embargo, sus pensamientos se vieron interrumpidos, cuando Gloria se paró a su lado y sin decir nada, se quedo viendo el paisaje junto a él…

-La hemos pasado bien Paul

-Estoy de acuerdo Gloria

-Es una lástima que solo estés de pasada

-No te preocupes, pensaba decirte que vinieras a Viena con nosotros

-¿Viena?

-Sí, tenemos unos compromisos allá y a todos les caes bien, así que podrías acompañarnos

Quizás era un poco descarado de su parte, al saber que la hermana de su esposa estaba presente y podía ver con malos ojos tal acción; algo que de todos modos ya era así, porque Sarah ya se encontraba sospechando sobre una aventura entre ellos dos, desde el primer día y hasta tenia pensando contarle a Mía sobre eso..

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Como ya era tarde y Ringo se encontraba cansado por estar todo el día afuera trabajando, Sarah no tuvo más opción que irse temprano a la cama con él, después de la cena. No obstante, sus intenciones de cerrar los ojos y dormirse, se vieron truncados, ya que el pensamiento de que Paul tenía algo que ver con Gloria Mackh, no era lo único que la atormentaba, sino también la ligera sospecha de que su novio, andaba un poco distante de ella en ese viaje y miraba a las chicas que se acercaban, más de lo debido….

-Richard, ¿tienes sueño?. Le pregunto al chico, cuando ya las luces estaban apagadas

-Si Sarah, ¿ocurre algo?

-No lo sé…

Contrariado, por la manera en que su novia le había contestado, Ringo encendió la lámpara que estaba a su lado y se volteo para verla directamente a los ojos. Sarah no se escuchaba muy feliz, y eso de cierta forma le preocupaba y confundía…

-¿Cómo que no lo sabes?

-Has estado muy distante de mí últimamente y me preocupa Mía

-¿Mía?, ¿Qué pasa con ella?

-Paul le es infiel es mi narices y es incomodo

-Sí, eso ya lo vi y te aseguro que es incomodo para todos

-Pero ya te dije que no es solo eso Richard….¿qué te pasa?

-¿Qué me pasa?, no entiendo

-Ya te dije, estas, muy distante

-No es eso Sarah, es solo que estoy cansado

Resentida no le volvió a hablar hasta la mañana siguiente, cuando salieron afuera donde estaban todos, esperando que la filmación comenzara. George era el único que repasaba su guion un poco lejos de todos, mientras Paul y John hablaban y bromeaban con uno de los camarógrafos y Cynthia se acercaba a la chica, al verle no muy feliz a esas horas…

-Hace mucho frio, ¿no crees?

-Sí, bastante. Respondió Cyn, de un momento a otro, al no esperar que Sarah le preguntara lo anterior

-Ya quiero irme a casa

-¿Te sientes bien?

-No, no creo la verdad

Cynthia sabía muy bien que quería decir Sarah, ya que ella también había notado lo extraño que andaba Ringo en los últimos días, así que se le acerco para abrazarla, hasta que John las interrumpió, sospechando que algo raro pasaba…..

-¿Pasa algo?. Pregunto con el ceño fruncido, provocando que su esposa se alejara de Sarah y lo viera seriamente

-Nada que les incumba. Contesto secamente, ya que no estaba muy feliz de estar ahí con el

-¿Por qué me hablas así?.....¿ahora qué diablos hice?

-De todo

-Vete a la mierda Cynthia, estas muy rara desde que volví de Bahamas

Aprovechando que John entraba en el tema, le dijo con la mirada a su amiga, que ya volvía y se fue aparte con el chico, para por primera vez en su relación, hablar seriamente con el…

-Esta es la última vez que me obligas a hacer algo. Le dijo con el mismo todo de antes, haciendo que John se enojara

-Sí, ya veremos…

-No John, ya nada es como antes y estoy cansada

-Si pretendes irte para huir con el tipo aquel, estas muy equivocada

-Ya veremos John, porque quiero el divorcio

Sorprendido con lo que Cynthia le acababa de decir, la miro a los ojos, con mucha rabia, hasta que escucho el director de la película llamarlos a grabar y le dio la espalda para irse. Que su esposa le fuera a pedir el divorcio, era algo que ni en sus sueños se imaginaba, y estaba seguro que era porque ella quería irse con Daniel, algo que no permitirá tan fácilmente…

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Sarah, por lo tanto, aun pensando en lo que se traían Paul y Gloria, ignoro a su novio y lo dejo solo, yéndose a buscarlos, ya que no los veía por ningún lado. Sospechaba que estaban en medio de una aventura y no se equivoco, cuando al caminar unos cuantos metros, los vio detrás de un remolque besándose. Antes hubiese pasado por algo como tal, pero ahora que el estaba casado con su hermana, no iba a permitir que algo así  sucediera delante suyo y furiosa se les acerco, interrumpiéndolos de inmediato…

-Sarah, ¿Qué haces aquí?. Le pregunto Paul nervioso, separándose bruscamente de Gloria

-Eres un descarado McCartney, mientras mi hermana está en la casa criando una niña y tratando de hacer algo para superar el hecho de que no tiene trabajo, tu estas aquí besándote con esta tipa. Eres lo peor

-Sarah, cálmate, ¿quieres?. Yo solo…

-No digas nada, sabía que se traían algo y le voy a decir a Mía

-No, tú no le vas a decir nada. Replico el chico muy molesto, provocando que Gloria se incomodara todavía más

-En tus sueños, no voy a ignorar esto

-Tú no vas a decirle nada, porque ella también lo hace

Observándolo como el hombre más descarado del planeta, Sarah le dio una fuerte bofetada; una igual a la que él le había dado a Mía antes, aunque esto, ella no lo sabía aun…

-¿Estás loca?, ¿Qué te pasa?. Le pregunto Paul en un grito, sobándose la mejilla

-Eres una basura Paul y si le haces daño a mi hermana, me las vas a pagar

Pero George, que iba pasando por ahí y logro presenciar todo lo sucedido, se acerco corriendo, agarrándole el brazo a Sarah para que no golpeara mas a Paul. Tenía que controlarla y tranquilizarla para que nadie más se diera cuenta de lo que estaba pasando.

-Sarah, tranquilízate, ¿quieres?

-Déjame George, tú eres igual

-Pues deja de meterte en las relaciones ajenas y concéntrate en la tuya que vi a Ringo besuqueándose con una chica, en el comedor del hotel hace unos días. Le dijo Paul a la chica, antes de agarrarle la mano a Gloria e irse de ahí

Estupefacta, por lo que Paul le había acabado de decir, Sarah se quedo parada y temblorosa unos segundos, hasta que reacciono y se fue corriendo hacia el hotel para encerrarse en su habitación. No obstante, George que aun seguía con ella, logro alcanzarla, sumergiéndola en sus brazos para consolarla, ya que sabía que por dentro se estaba desmoronando…

 -¿Es cierto?. Pregunto entre sollozos, mirándolo a los ojos

-¿Qué cosa?

-Lo de Richard, ¿Qué más?

-No sé, pero vamos adentro para que tomes algo y te termines de tranquilizar

George tampoco sabía sobre lo que Paul le había dicho a Sarah e igual de sorprendido, la llevo hasta su habitación, donde pidió una taza de té caliente para darle. Sin embargo, Sarah no tenía ánimos de té y le quito la bocina cuando él hablaba con los de servicio, para pedir en cambio una cerveza y una botella de Whiskey. No tenía planeado embriagarse pero el alcohol era para ella, lo único que la podía calmar.

-Tienes que hablar con él, puede que sea invento de Paul para fastidiarte

-No George, creo que Paul no miente, porque lo siento, tengo un presentimiento de que es verdad

-De todos modos, es mejor que lo convencen y traten de solucionarlo, las discusiones no son buenas

-¿Te acuerdas cuando yo te gustaba a los 14?

-Sí, me gustabas mucho pero tú querías a Paul así que me rendí

-Creo que contigo si me hubiera ido bien George

-¿Qué quieres decir?

-Que si te hubiese hecho caso, lo nuestro si hubiera funcionado

Mirándola directamente a los ojos, George comprendió que podía ser cierto lo que ella le decía e hipnotizado, ni siquiera sintió cuando ella lo jalo de la camisa y le planto un beso en los labios. No por despecho hacia a Ringo, si no porque en el fondo siempre había tenido ganas de hacer eso….

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 En Londres las cosas transcurrían con normalidad, mientras la primavera hacia florecer los árboles y plantas de los parques y el sol calentaba un poco, el frio cemento por donde caminaban las personas y manejaban los automóviles. Victoria, ya en sus vacaciones de mitad de curso, decidió aprovechar y hacerle una visita a alguien que no veía desde hace semanas. Joseph que por estar ocupado con su trabajo y saber que ella tenía algo con George, se alejo un poco de ella, hasta ahora cuando la vio plantada en el umbral de su puerta y la invito a pasar, invitándola también de paso, a un cigarrillo….

-Es una sorpresa que hayas venido

-Te extrañaba

-¿En serio?

-Por supuesto, eres uno de mis amigos más cercanos

-Eso no lo sabía

-Bueno, ahora lo sabes

Con una media sonrisa, abrió una de las ventanillas que había allí en la sala y daba hacia la calle, y la invito a otro cigarrillo, esta aceptándolo con gusto, ya que aunque podía ser malo para su salud, le gustaba mucho fumar.

-Estas de novia con George, ¿no es así?

-¿Cómo lo sabes?

-Mi intuición esta subdesarrollada

-No bromees Joseph

-No bromeo

-De todos modos, adivinaste, si lo estoy pero…

-¿Qué?

-No creo que vaya a funcionar saber

-¿Por qué lo dices

-El es muy famoso, muchas chicas lo quieren y yo, no soy nadie

-¿Cómo que no eres nadie?, claro que sí, todos somos alguien

-Bueno si, pero a lo que me refería es que, yo soy otro ser insignificante en este planeta y el es una súper estrella

-Eso no tiene nada que ver Vicky, si él te quiere, eso no tiene relevancia

Pero lo que Joseph no entendía, era que en el fondo ella tenía miedo de que la popularidad de George, afectara su relación y lanzando un fuerte suspiro, Victoria se levanto y se sentó a su lado, apoyando su cabeza en el hombro del chico…

-Tienes razón Joseph, pero no es exactamente eso lo que me preocupa

-¿Entonces qué es?

-No lo entenderías

Y en silencio se quedaron un largo rato, con las respiraciones pausadas y las manos entrelazadas, evitando hacer un movimiento lo menos posibles. Hasta que cansado, Joseph la soltó y se levanto, parándose en frente de ella..

-Vamos

-¿A dónde?

-A donde sea…

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Aprovechando que Isabelle tomaba su siesta, tomo el libro que le leía -el mismo que Paul regalo antes de irse a Bahamas-,y lo puso sobre la mesa, viendo el tinte de cabello que quería ponerse y la máquina de escribir que se acababa de comprar, no muy lejos de ahí. Seguía escribiendo, las ideas para la trama eran aun más claras que antes y el Libro Tibetano de los Muertos la estaba ayudando más lo que pensaba; se encontraba muy inspirada y escribía mucho todos los días, por lo que esperaba terminarlo pronto. Sin embargo, había otra cosa que debía hacer y antes de sentarse y ponerse a escribir otra vez, agarro el tinte con sus dos manos y se fue al baño, a ponérselo. No tenía mucho conocimiento sobre cómo se ponía algo así, pero leyendo las instrucciones se guió  tapando su cabello castaño con los químicos que dio lugar, de nuevo, al antiguo cabello rubio que tuvo antes. Si le iba a dar un cambio a su vida y sobre todo matrimonio, también se lo iba a dar a su aspecto……