Capitulo 23

 El viento haciendo volar su cabello y cerrar sus ojos, mantuvo a Victoria riendo en el trayecto, a la vez que por primera vez faltaba a la universidad. Quizás para muchos Joseph estaba siendo una mala influencia, pero a ella no le importo, porque definitivamente el paseo en motocicleta por la noche, cambiaba radicalmente y ahora este era mucho mejor que el anterior, porque el reflejo de las luces contra los espejos y las calles vacías, la envolvieron en una confianza que jamás experimento en su corta vida, una confianza que la estaba haciendo pasar el momento más divertido de su vida junto a alguien que apenas venia conociendo…………

-¿A dónde vas?. Le pregunto la chica a Joseph, en casi un grito por el ruido que producía la motocicleta

-Ya veras, no te impacientes. Le contesto el chico con una media sonrisa

-Oye Joseph, gracias

-¿Por qué?

-Por hacerme pasar este momento tan agradable. Le contesto Victoria mientras se volvía a agarrar fuerte de su cintura

Joseph sonrió, por ver lo feliz que se encontraba Victoria, nunca había hecho tan feliz a alguien y de cierto modo se sentía bien con eso, al igual que satisfecho. No obstante, la noche no acababa ahí y tanto el cómo Vicky lo sabían, aunque esta última se sintiera confundida por no saber a dónde irían a parar, sin embargo, su duda se disiparía muy pronto, porque justo unos minutos después, llegaron a un pub, que estaba en una calle algo solitaria de la ciudad.

-No conocía la existencia de este lugar. Dijo en voz baja Victoria, mientras entraban

-No es muy famoso, pero aquí siempre me reúno con mis amigos. Señaló Joseph después de saludar a unos chicos que estaban cerca de la entrada

-¿Me vas a presentar a tus amigos?. Le pregunto la chica, sorprendida

-Sí. ¿Hay algo de malo con eso?

Pero Victoria no pudo contestarle, ya que una chica con cabello cortó y oscuro, se acerco a Joseph y lo saludo alegremente, haciendo que Vicky tomara la oportunidad, para mirar a su alrededor tímidamente, notando de inmediato que el lugar estaba lleno de Mods y ella era la única ahí que no lo era, esto último haciendo también, que el resto de personas la miraran de pies a cabeza y se preguntaran entre ellos quien era esa chica y que estaba haciendo ahí. No obstante, Joseph se apresuro a presentarla con un grupo de chicos que estaban en una mesa esquinera del lugar, hablando y riendo, mientras una música estridente salía de una rockola y no permitiera que la chica escuchara de qué hablaban, hasta que se acerco lo suficiente…….

-Chicos, les presento a Victoria Brown, una amiga

Todos se quedaron callados, mirándola de la misma forma que el resto de la gente del lugar. La chica era diferente a ellos, mucho y les extrañaba que Joseph tuviera una amiga como ella y no cualquier amiga, sino alguien que apenas venia conociendo todo eso y no parecía la clase de persona que le gustara.

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La estadía en Rembrandt, estaba siendo para todos más agradable de lo que pensaron días antes. Las tardes tomando el té en el jardín mientras se contaban anécdotas, se estaban siendo ya costumbre y tanto Mía como la pequeña Isabelle disfrutaban esos momentos, donde se demostraba el gran papel de abuelo que ahora Jim estaba tomando  y la aceptación de la familia entera con todo este hecho, que les había sorprendido bastante al principio.

Esa noche, cuando la cena acababa de pasar y todos se dispusieron a ir a dormir o ver televisión, Mía sin ganas de dormir, se encamino hacia el salón principal, donde la chimenea aun permeancia encendida. La chica se sentó en el pie del sillón, mientras observaba el fuego y se soplaba un mechón de cabello que caía justo frente a sus ojos, sin ni siquiera darse cuenta que Paul se acercaba a ella y se sentaba a su lado.

-Hola. La saludo el chico, sacándola de inmediato de su ensoñación

-Hola. Saludo Mía con una media sonrisa

-¿Isa ya se fue a dormir?

-Sí, hace poco. Le respondió la chica, mientras todavía miraba el fuego de la chimenea

-Y tú, veo que no tienes sueño

-Veo que tu tampoco Paul, ¿extrañas a Jane?

-¿Por qué preguntas eso?

-No sé, simple curiosidad

Paul sin querer responderle, rodeo los hombros de la chica con su brazo, quedándose algunos minutos asi con ella, hasta que Mía reacciono y lo volvió a ver algo contrariada.

-Estas muy cariñoso eh

-¿Qué?, ¿no puedo abrazar a una amiga?. Le pregunto el igual de contrariado

-Oh Paul, tu no cambias

-Tú tampoco, sigues igual de pesada que antes

-Mentira. Exclamo la chica molesta, a la vez que le daba la espalda

-Hey, es broma. Le dijo Paul detrás de ella, riendo por su reacción

Pero Mía no le hizo caso y lo ignoro, hasta que Paul insistente se puso frente a ella y le hizo una mueca que la hizo reír muchísimo, junto a él.

-Eres un tonto Paul

-¿Si?, bueno saberlo entonces

-¿Por qué no te vas a dormir ya?

-Sí, creo que ya es hora pero antes de eso. ¿Por qué no me acompañas mañana temprano a un parque que queda aquí cerca, con Isa?

-¿Mañana temprano?, no lo sé Paul

-Oh vamos, no hemos salido aquí todavía

-Bien, iremos, después de todo, la idea no esta tan mala

Paul feliz de ver que en definitiva Mía estaba ahora siendo mucho más agradable con el que antes, se fue a dormir, con la esperanza de comenzar una buena relación de amistad con ella, por el bien de Isabelle.

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El sonido del mar y el silencio que rodeaba a este, llegaban todos los días a ser la única compañía de Sarah, desde que estaba en Ibiza. Había alquilado una casa cerca de la costa, apenas llego y disfrutaba mucho sentarse en la arena, a pensar y a disfrutar la soledad que le ofrecía el entorno. Sin embargo, la noticia de que la chica estaba en la isla, llego a oídos de todos los habitantes y visitantes, e invitaciones a fiestas no tardaron en llegar. Al principio la chica se negaba, no había ido a ahí para compartir con gente, sino para relajarse y estar sola; no obstante, al pensarlo mejor, término aceptando una de ellas, que se efectuaría esa misma noche.

Saco el mejor vestido que tenia dentro de la maleta y después de darse un baño, se lo puso y sin peinarse demasiado salió directo a donde sería el evento, específicamente en un pub muy popular que quedaba en el centro de la ciudad. Al parecer, otros famosos estarían ahí y Sarah sabía a la perfección que se encontraría con conocidos, por lo que se mantuvo tratando de hacer buena cara desde que entro, o por lo menos hasta que vio una “amiga” suya también modelo, que se acercaba con un chico detrás.

-Sarah querida, que bueno verte

-Hola Alexa, lo mismo dijo. Saludo también Sarah, con una sonrisa falsa

-No sabía que estabas aquí en Ibiza. ¿Dónde está Ringo?

Al escuchar el nombre de Richard, comenzó a sentir un fuerte dolor de cabeza, que tuvo que disimular junto con una mentira, debido a las circunstancias.

-Ya sabes, trabajo y yo pues necesitaba unas vacaciones así que vine sola

-Hiciste muy bien, yo también necesitaba unas vacaciones y vine con un amigo. Sarah, te presento a Robert

-Buenas noches señorita. La saludo el chico, dándole un beso en la mano

-Hola………

-Ven con nosotros, estamos en el segundo piso en una mesa fabulosa

-No se Alexa, yo……..

-Oh vamos Sarah, nos divertiremos juntas, como en Londres. Insistió la chica, ya casi jalándola del brazo

-Está bien, vamos……..

El resto de la noche, Sarah por primera vez en su estadía ahí, se divirtió y olvido a Ringo, tanto que hasta se fue a bailar con Robert y tomo alcohol como nunca antes, mientras reía y hablaba animadamente con todos los presentes, no arrepintiéndose ni un solo segundo de haber llegado esa noche.

-Creo que para la próxima, voy a fiestas con Alexa mas seguido. Comento Robert mientras bailaban en media pista de baile

-¿Por qué lo dices?. Pregunto Sarah confundida

-Porque así conozco chicas lindas como tú, mas seguido

Sarah se sonrojo de inmediato, al escuchar lo que el chico le acababa de decir, era muy buen mozo y simpático y hacia mucho que alguien así no le decía algo semejante. No obstante, el alcohol al no tenerla viendo, escuchando y pensando cómo se debía, hizo que poco después correspondiera el beso que le estaba comenzando a dar el chico, uno que poco a poco se volvía muy apasionado, mientras Robert la encaminaba junto a él al baño.

-¿A dónde me llevas?. Le pregunto Sarah, otra vez confundida

-Shhh, tu sígueme. Le contesto el chico con una sonrisa coqueta

Sarah sonrió, de forma coqueta también y se dejo llevar hasta el baño de chicas, que se encontraba desocupado, donde volvieron a retomar el beso que poco antes habian comenzado. Le estaba siendo infiel a Ringo y por primera vez en su relación estaban a mano con una infidelidad.

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John, Cynthia y el pequeño Julian, habian estado pasando ese mes, unas grandes vacaciones en el Caribe, ahora se encontraban en Hawaii y por primera vez John se estaba comportando bien y eso era lo que más le estaba gustando a Cyn, aunque al parecer no duraría mucho.

-Así que te llamas July, eh, es un gusto

-El gusto es mio John, no sabía que iba a encontrar a un Beatle por estos lares

-Ya ves, estamos en todos lados

La chica rio por el comentario de John y también por la cara graciosa que hizo, hacia ya 10 minutos que se encontraban hablando, debajo de un árbol, en frente del mar y la conversación cada vez era más animada. No obstante, John, algo incomodo, comenzó a notar casi al instante, que la chica le coqueteaba algunas veces y ya Cyn estaba por bajar de la suite del hotel.

-¿Viniste solo?. Le pregunto la chica, interesada mientras se acercaba mucho más a el que antes

-No, vine con mi esposa y mi hijo. Respondió John, simpático

-¿Ah sí?, que lastima

-¿Por qué?

-Porque si hubieras venido solo, nos podríamos divertir juntos

John se quedo en silencio, mirando a la chica a los ojos, era muy guapa, tenia bonitos ojos y le estaba comenzó a gustar más de lo que debería. Por lo que se puso un poco nervioso y ella lo noto

-¿Pasa algo?, te ves tenso

-No es nada, tranquila

-¿Seguro?, porque se dar muy buenos masajes. Le contesto la chica con voz coqueta

Afortunadamente, Cyn no tardo en llegar y se puso en frente de ellos 2 con el ceño fruncido y confundida, por ver a John con una chica desconocida a solas.

-Cyn, por fin llegas. Exclamo John, levantándose de un brinco

-¿Quién es ella?. Le pregunto la chica, todavía confundida

-Oh ella…….. es July

-Tú debes de ser Cynthia, ¿no?. Te he vi en el periódico una vez. Le dijo July a Cyn, parándose en frente de ella

-Sí, soy yo

-Bien, fue un gusto en conocerte, hasta luego Johnny

Después de despedirse de John, con un beso muy cerca de la boca, se alejo de inmediato, dejándolos en un silencio incomodo, mientras Julián amenazaba con irse al mar solo.

-Que simpática chica te has encontrado

-Sí, muy simpática

-Tanto que casi te come, ¿o no?

-Oh Cyn, no empieces. Mascullo John, poniéndose molesto

-Solo decía…….

-Oye, me alegra que hayas venido a tiempo

-¿Por qué?

-No sé, solo me alegro

Y sin decir nada mas, se alejo de ella junto con Julian, dejándola sola, pensando en esas palabras, a la vez que comenzaba a sentir una extraña desconfianza que se veía de inmediato opacada por el amor que le sentía a John.

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Mía se levanto muy temprano en la mañana, después de pasar una mala noche, en la que se mantuvo pensando en Sarah, le preocupaba su hermana, no la había llamado como le prometió y no sabía cómo estaba en Ibiza y si ya había tomado alguna especie de decisión. Así que con grandes ojeras, salió de la habitación junto con su hija y se fue a desayunar con toda la familia, ese sería el ultimo día que estarían ahí y definitivamente iba a extrañar  la amabilidad de todos, inclusive la de Paul, que muy pronto se iría de gira y regresaría hasta dentro de algunos meses.

-Buenos días. La saludo el chico, con una gran sonrisa

-Buenos días Paul

-¿Estas lita?

-¿Para qué?

-Para el paseo en el parque, ya le dije a Isa y está muy emocionada, así que no creo que debamos tardar mas

-Ah sí, el parque

-¿Pasa algo?, ¿ya no quieres ir?

-No, para nada Paul, vamos……

Se encaminaron al lugar, después de ponerse sus abrigos, hacia frio afuera y era lo más conveniente. No obstante, a Mía eso era lo que menos le preocupaba, ya que salir con un chico tan famoso como él, podía dar de que hablar y no quería ocasionar problemas.

-Es una lástima que mañana tengamos que irnos. Comenzó a decir Paul, en un intento de entablar una conversación con ella

-Sí, que mal

-Pero le prometí a Jane, irnos a algún lado juntos, así que no puedo tardar más

-Así que tu también te vas……

-Sí, porque, ¿pasa algo?

-No, me alegro por ustedes 2

Se sentaron en una banca, juntos, en silencio, pensando cada uno en algo diferente, mientras observan de lejos a la niña, correr y jugar. Tan solo 7 años antes, se venían conociendo y ahora eran padres y tenían una historia juntos. Paul, al recordar eso, la volvió a ver con una sonrisa, durante varios minutos, en los que ella se mantuvo mirando el cielo nublado, hasta que se giro a verlo y se encontró con sus ojos.

-Sí que hace frio

-No te pusiste guantes. Mascullo Paul, muy extrañado

-No, no me gustan los guantes. Le contesto la chica, a la vez que se daba cuenta lo frías que estaban sus manos. -Creo que Isa ocupa ayuda en los columpios. Comento Mía, mirando hacia la dirección donde estaba su hija-

-Es cierto, creo que iré a donde ella

Mía, prefirió quedarse ahí sentada, el resto del rato, mientras veía a Paul empujar a Isa en los columpios y ella reía. Si John no hubiera descubierto y dicho nada, ambos seguirían sin conocerse y Mía comenzaba a pensar que eso siempre fue muy injusto de su parte.

-Mami, ven. Le grito la niña, haciendo que se parara de inmediato y se acercara a donde estaban

-¿Quieres que también te ayude?

-Sí, pero con esto. Le respondió Isabelle, mientras le daba el lazo que llevaba en la cabeza y comenzaba a perseguir una mariposa que acababa de pasar

Paul, sin decir nada, se paró a la par de Mía,  justo después de que la niña se alejara, tratando luego de quitarle con delicadeza el accesorio de la niña, hasta que el frio de las manos de la chica traspaso la tela de sus guantes y con preocupación las entre lazo con las de él para calentarlas un poco.

-No hace falta Paul. Expresó Mía, mientras se trataba de soltar

-Claro que sí, no quiero que tus manos se congelen

-¿Y por qué no?

 -Porque son hermosas y comenzaría a extrañar la suavidad que poseen, de inmediato

Mía, comenzó a reír por su comentario, hasta que logro soltarse y Paul se acerco mucho mas a él para abrazarla, sin ni siquiera darse cuenta, que unos cuanto metros delante de ambos, había un fotógrafo, que al escuchar que Paul McCartney estaba en esa ciudad, fue hasta ahí y ahora lo veía por primera vez en medio de una escena que de inmediato comenzó a captar con su lente.

-Contigo, no sería tan tonto de sentarme y cantarte sobre las estrellas Mía, porque sé cómo eres, sé que no te gusta eso, pero si la manera en que abro mi corazón cuando te miro a los ojos, o te protejo de cualquier cosa que quiera desaparecer tu belleza. Le susurro Paul, mientras se miraban, muy cerca el uno con el otro

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Pasar toda la noche, con los amigos de Joseph, fue lo mejor que había hecho en años, todos eran muy divertidos y simpáticos y aunque le costó al principio, adaptarse un poco al grupo, ahora estaba ahí junto a ellos, en el callejón que estaba a la par del pub, riendo y fumando un poco, mientras la calle comenzaba a llenarse de gente cada vez mas.

-Parece que va a llover. Musito Victoria, preocupada

-¿Y qué?. Le pregunto Joseph, entre risas

-No, nada, solo decía…….

-Sabes Vicky, espero que sigas viniendo. Le dijo uno de los chicos, que estaba en frente de ella

-¿En serio quieren que siga viniendo?

-Por supuesto. Respondieron todos casi al mismo tiempo

-Viste, les caíste muy bien. Le dijo el chico, con una gran sonrisa

-Pues veré cuando puedo entonces

No conocía muy bien cómo eran los famosos Mods, pero definitivamente no eran como la prensa decía que eran y a Victoria, le agradaba conocer gente diferente a la que se relacionaba diariamente.

 -¿Quieres?. Le pregunto la chica de cabello corto de la noche anterior, que se llamaba Gloria

-¿Pastillas?. Pregunto Victoria confundida, al ver un par de píldoras en la mano de la chica

-Toma y te darás cuenta que es. Le dijo la chica después de guiñarle el ojo

Un poco desconfiada, volvió a ver a Joseph, que con la mirada le transmitió la confianza suficiente para que después de aceptar el par de píldoras, se las tomara sin ningún liquido de por medio. Sintiendo diferente poco después y también eufórica, aunque no era la única ya que todos habian tomado las mismas pastillas momentos antes. No obstante, lo que no sabía Victoria es que esas píldoras eran metanfetaminas y por primera vez se había drogado y por primera vez estaba experimentado algo de muchas otras cosas que vendrían en el futuro, a mano de ese nuevo grupo de amigos que de un día para otro ya se había conseguido. 

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Hola chicas, aqui estoy con un nuevo capitulo, no estaba muy motivada con seguir con esto, pero despues de aclarar algunas cosas y de saber que a ustedes si les gusta de verdad esto, decidi seguir, ademas de que el soundtrack de la pelicula Submarine (si no la han visto se las recomiendo ;) me inspiro tambien, de hecho, ya tengo las canciones oficiales que me seguiran inspirando para esta historia jajajajajajaaja quiero aclarar tambien, que yo se que a todas les gusta esto y que todas son fans pero dije que Paty era mi mas grande fan porque es la que mas motiva con esto y porque siempre dice que ama la novela jajajajajaja asi que perdon si pensaron que estaba diciendo que ella era la unica que gustaba de la fic, no quise decir eso, gracias por seguir leyendo y alguna cosa que no les este gustando del fic me dicen en los comentarios por fa, saludos :)

Capitulo 22

Todo pasaba tan rápido frente a la ventana, que poco a poco Isabelle se iba quedando dormida en los brazos de su madre, el viaje a Cheshire se estaba tornando un poco largo, esto cansando a la niña que después de jugar con sus padres, cayo rendida, dejando a Paul y Mía en silencio, con ganas de hablar sobre algo pero sin saber de qué.

Habian partido desde muy temprano a la casa del padre de Paul, en auto, con Alf el chofer de los chicos, en el volante. Mía se encontraba un poco nerviosa, ya que Jim todavía no sabía nada, exceptuando la visita que según él, solo Paul y Mía le darían. La chica conocía a la familia McCartney desde muy joven, su madre hasta había asistido al funeral la Señora McCartney, así que a Jim le complacía volverla a ver después de tanto tiempo y ella lo sabía, sintiendo más nerviosa aun, algo que Paul noto enseguida cuando despejo su mirada del libro que iba leyendo y la volvió a ver.

-¿Te sientes bien?. Le pregunto Paul, con tono de preocupación

-Sí, muy bien. ¿Por qué no lo estaría?

-Te ves nerviosa

-¿Yo?, no que va, estoy bien, tranquila. Contesto la chica con una risa nerviosa

-Mía, no te mientas así, estas nerviosa por la reacción que va a tomar mi padre cuando sepa todo

-Nos va a matar, ¿cierto?

-Sí, nos va a acribillar. Exclamo Paul, con cara de asustado

-Paul, por favor. Lo reprendió Mía, poniéndose todavía mas nerviosa

 -¿Qué?, vamos, mi padre no es ogro, hablaremos tranquilamente con él, le explicaras porque no me dijiste nada antes y listo

-¿Por qué todo lo haces ver tan fácil cuando no es así?

-Mi padre no te va a odiar ni a rechazar a Isa, en serio

Mía lanzo un bufido, a la vez que trataba de creer las palabras de Paul y trataba de relajarse. Quizás el chico tenía razón y lo mejor era ponerse a pensar en otra cosa o tratar de hablar con él, que parecía dispuesto a conversar de cualquier tema, como siempre……

-Es raro, ¿no?

-¿Qué cosa?. Pregunto Paul contrariado

-Como llegamos a todo esto, jamás me imagine que iba a tener un hijo contigo

-Yo tampoco, mucho menos por cómo me tratabas.

-Era una mala persona, discúlpame Paul en serio

-No te disculpes, en serio, ya está olvidado y superado

-Pero te lastime muchas veces

-Sí, es verdad pero éramos muy jóvenes y yo debí de entender que no me querías, así que también es culpa mía

-Jane es muy afortunada de tenerme, eres el chico más dulce que he conocido Paul

Paul le dedico una sonrisa, mientras agarraba la mano de Mía y la acariciaba un poco. Le alegraba ver como la chica había madurado y ahora lo trataba mucho mejor. Esto ahora permitiéndole empezar una charla muy amena con ella en lo que restaba del camino.

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Victoria salió muy feliz, del edificio donde todas las mañanas tenía que ir a trabajar, después de recoger unas cuantas cosas suyas en el departamento de Sarah. Le habian dado 3 días libres y eso la alegraba más de lo que pensaba pero que si se notaba, o lo notaba la gente que pasaba a su lado, incluyendo Joseph el chico que conoció aquel día antes de la fiesta de Mía, que venía apenas bajándose de su motocicleta cuando se la encontró de frente.

-Hola. Saludo el chico, con una sonrisa agradable

-Ah hola, Joseph, ¿cierto?

-Sí y tú eres……

-Victoria. Le contesto la chica, un poco tímida

-Victoria, ¿Dónde vas tan feliz si se puede saber?

-No sé, tengo día libre y mañana también y pasado mañana también

-Que, ¿te despidieron acaso?

-No, pero la niña que cuido se fue de vacaciones con su madre o algo así

-Ya veo……

Victoria que estaba asombrada por ver como alguien que apenas había visto un día, ahora le hablaba con tanta confianza, pensó en hacer tema de conversación con el chico, después de todo, parecía ser muy agradable.

-¿Y tu no trabajas o algo así?. Le pregunto la chica extrañada

-Sí, pero igual tuve día libre, en realidad, no pase la noche en casa, vengo llegando

-Así que un chico rebelde eh, que interesante

-Sí, me la pase toda la noche con amigos, cuando llegue a casa mi madre no me recibió con muy cara y bueno mi padre es más accesible y pensé en venirlo a visitar

-¿No vives aquí?

-No, mi padre es el que vive aquí pero yo vengo seguido a verlo, era lo menos que podía hacer después de que me comprara la motocicleta

-¿Qué motocicleta?. Le siguió preguntando la chica, cada vez más curiosa

-Esa de ahí. Le respondió Joseph, señalando la motocicleta que estaba en frente de ellos

La chica dirigió interesada, su mirada hacia la motocicleta Vespa que se encontraba ahí, llena de espejos, recordando en seguida aquellos Mods que vio en el pub con su amiga. Al parecer Joseph era uno de ellos y eso la asusto un poco.

-¿No es una belleza?, mi padre me la compro el año pasado

-Sí, es una buena motocicleta, pero tu……….Intento decir Victoria, mientras buscaba una manera de no ser muy directa

-¿Qué?

-Eres un Mod, ¿cierto?

-Sí, lo soy pero, ¿eso qué?

-Oh nada, nada, es muy interesante que seas uno de ellos

-¿En serio lo crees?, siempre tengo problemas con mis padres por culpa de eso

-En serio, es genial, es un movimiento muy interesante

-¿Te agradan los Mods?. Le pregunto el chico, bastante confundido ya que era la primera persona que reaccionaba bien al darse cuenta de lo que era

-Sí, no conozco mucho sobre ellos, pero me agradan

-¿Quieres ir a dar una vuelta conmigo?

-¿En la motocicleta?

-Sí, ¿Qué dices?

Pero Vicky no pudo responder, ya que en esos momentos, observo como George se acercaba a ella con una sonrisa. Ahora tendría que explicarle a Joseph como conocía a un Beatle y eso no le agradaba para nada.

-Hola Vicky, que gusto verte. La saludo George, más simpático que otras veces

-George…… hola. Balbuceo la chica, por lo nerviosa que se estaba comenzando a poner

-¿George Harrison?, ¿Conoces a George Harrison?. Le pregunto Joseph a la chica, con una sonrisa burlona

-Oh disculpa, no sabía que les había interrumpido la conversación. Dijo George, muy apenado, a la vez que ignoraba la pregunta del chico

-George, el es Joseph. Le dijo la chica, muy incómoda mientras Joseph le extendía la mano a George y se trataba de presentar

-Mucho gusto George

-Igualmente. Le contesto el chico, preguntándose qué seria ese tal Joseph de Victoria

-¿Y bien?, ¿vamos?. Le pregunto Joseph a la chica, mientras esta miraba a George como dudando si aceptar o quedarse con el

-Yo venía solo a saludar, fue un gusto verte de nuevo Victoria

-George, yo……….

-Nos vemos luego, adiós Joseph. Se despidió el chico, yéndose de inmediato

Victoria se quedo mirando hacia la dirección que había tomado George para irse, mientras Joseph la miraba confuso y comenzaba a preguntarse muchas cosas con respecto a eso que acababa de pasar. Preguntas que comenzaría a responderse poco a poco.

-No sabía que conocías a George Harrison

-Es amigo de la hermana de Mía, mi jefa

-Claro, es famosa, debe de ser muy amiga de los Beatles. ¿Te gustan los Beatles?

-No y no tengo nada con ninguno

-Me alegra, los Beatles son para adolescentes, ¿o no?

-Sí, ¿vamos?

-Por supuesto

Y ese “vamos”, llevo a Victoria a por primera vez en su vida, subirse a una motocicleta y por fin hacer algo diferente ese día, aunque al mismo tiempo se sintiera mal por George, el chico le agradaba mucho y sentía que lo había rechazado de una manera no muy agradable.

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Las vacaciones en esas islas paradisiacas, estaban siendo hasta ahora, el mejor descanso que se habian tomado John y Cyn, junto con Julian. La estaban pasando muy bien en Tahití y la chica, lo único que esperaba era que John se siguiera comportando así de bien el resto de las vacaciones, sobre todo en esos momentos, que lo buscaba con la mirada en media playa, ya que había desaparecido de la nada hacía ya mucho rato, sin saber que venía detrás de ella y estaba a punto de sorprenderla como pocos veces antes lo había hecho.

-Hey, ¿A dónde estabas?. Le pregunto ella molesta, cuando John comenzó a caminar a su lado

-Estaba en el baño, ¿Por qué?

-No por nada, me asustaste

-¿Y porque te asustaste?. Le pregunto John, tratando de no reírse

-No lo sé, supongo que me preocupo demasiado algunas veces

-La verdad que sí, pero tranquila ya vine 

-Sí, ya regresaste…….

Dudosa, se encamino junto a él y su hijo, a una sombra que había debajo de un árbol cercano. El sonido del mar hizo que se le pasara todo lo que sentía al instante, aferrándose al brazo de John casi en el acto, mientras suspiraba. Sospechaba tantas cosas de él, pero lo amaba y necesitaba comenzar a confiar más en el.

-¿Te pasa algo?. Le pregunto John, casi en un susurro

-No, es solo que………

-¿Qué?

La chica se incorporo, poniéndose en frente de el, mientras de nuevo suspiraba y el la miraba contrariado. Estaba muy rara últimamente y esperaba que le diera una explicación por eso.

-A veces pienso que tú no me quieres. Le dijo Cyn cabizbaja

-¿Estás loca?, claro que te quiero

-¿Estás seguro?

-Por supuesto Cynthia. ¿Por qué estas dudando de eso ahora?

-No lo sé, he escuchado cosas

-¿Cosas?

-Sí, he escuchado que me eres infiel

John lanzo un bufido de fastidio, por escuchar ahora a su esposa comenzar a hablar sobre ese tema. Claro que le ha sido infiel, pero no se atrevía a decírselo, ella era muy sensible y podía lastimarla severamente, por lo que ahora no sabía qué hacer o que decir y simplemente le sonrió y luego la abrazo, siendo correspondido de inmediato.

-No creas todo lo que escuchas, te amo Cyn. Le dijo John en el oído, después de darle un beso en la frente

¿Entonces es mentira?

-Sí, lo es…………

Sonriente, lo volvió a abrazar más tranquila y confiada. Aunque ojala y John estuviera diciendo la verdad………

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Se sentó en el sillón, tratando de asimilar lo que su hijo le acababa de decir. No tenían ni un par de horas en la casa y ya se había enterado que sin saberlo era abuelo, simplemente era una noticia difícil de digerir y también de aceptar, ya que se sentía decepcionado de ambos. Mía y Paul por su parte, se quedaron callados mirándolo, al igual que Mike, que estaba al lado de su padre y no podía creer esa noticia.

-Papá, lo siento. Le dijo Paul a su padre después de un gran rato de silencio

-Yo, es difícil creer todo esto. ¿Mía estás segura de que Paul en serio es el padre de la niña?. Le pregunto Mike a la chica, un poco inseguro

-Muy segura Mike

-Vaya, pero esto en serio que es una gran sorpresa. Mascullo el chico, mientras se recostaba al sillón

-Quiero que me disculpen, yo……….. Fui una estúpida

-No Mía, tu no fuiste una estúpida

Jim los volvió a ver una vez más, mientras todos se quedaban en silencio nuevamente. Este era uno de los momentos más difícil por lo que había pasado Mía y tenía ganas de llorar y pedir disculpas de rodillas, había supuesto que ese era el castigo por haber tratado tan mal a Paul en el pasado, pero ahora se daba cuenta que fue un error escondérselo y echarse la culpa de todo y las consecuencias de ese error las estaba pagando ahora.

-Las cosas no serian las mismas si nos hubieras dicho Mía. Comenzó a decir Jim, preocupado

-Lo sé. Le contesto la chica, muy avergonzada

-Todo sería mejor ahora, pero supongo que así es la vida

-Papá yo…….

-No digas nada mas Paul, la niña es una bendición y aunque estoy algo decepcionado por saberlo hasta ahora, me alegra de cierto modo, espero que la traigas más seguido Mía

Y con esto último dicho, se paro del sillón y salió de la sala, dejándolos solos, con ahora Mike en frente, pero no enojado o algo así, sino con una media sonrisa que luego se transformo en una fuerte risotada, a la vez que Mía y Paul lo miraban contrariados.

-¿Y ahora a ti qué diablos te sucede?. Le pregunto Paul con el ceño fruncido

-Ves Mía, si no le hubieras pegado a Paul aquella vez en la escuela esto no estuviera pasando

-No te burles Mike, esto es serio

-Déjalo Paul, tiene razón. Le dijo Mía a Paul, antes de también pararse y salir de allí

Paul miro a su hermano de mala manera, haciendo que este parara de reír y se sentara a su lado. Todo le parecía muy irónico y por eso se reía, pero la verdad es que Paul tenía razón, era algo serio y no podía seguir con ese juego, no ahora……

-Oye, no te molestes conmigo

-No estoy molesto contigo Mike, es solo que…….

-Deberías de darle las gracias a Mía, si te hubiera dicho esa vez que estaba embarazada, estaría infelizmente casado con ella

-Tienes razón, supongo que pensó más en mí de lo que creía

-Es una buena chica y espero que se lleven mejor ahora, porque tienen una niña muy dulce como para que vea esos ejemplos

-¿Crees que sea buen padre?

-El mejor

Y sería el mejor de todos, aunque ya nada sería lo que era antes, empezando por su vida y siguiendo por su carrera.

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George entro a su departamento, con un semblante serio, sin la sonrisa con la que salió un rato antes. No sabía exactamente porque, pero ver a Victoria con otro chico, lo hicieron pensar muchas cosas y Ringo apenas lo vio entrar, lo noto, no estaba bien y tenía que preguntárselo ahora mismo.

-Viniste rápido, ¿no se encontraba Victoria?

-Sí, si estaba. Le respondió George, mientras se tiraba al sillón

-¿Entonces?

-Creo que tiene novio

Ringo entre cerro sus ojos, por lo confundido que ahora estaba por eso ultimo que le dijo su amigo. No se imaginaba que la chica no estaba soltera y por eso algo sorprendido se acerco a George, tratando de dispersar sus dudas.

-¿En serio?

-Sí, cuando llegue a la puerta del edificio estaba hablando con un tipo, se llama Joseph

-¿Y?

-Creo que son novios

-George, si no estás completamente seguro no lo digas

-Pues si, tal vez

-Además, ¿Por qué te pones así por eso?, creo que me habías dicho que no te gustaba

-Y no me gusta, pero pensé que éramos amigos y le gustaba estar conmigo

-¿Y que con eso?

-Prefirió irse con el tipo ese, es obvio que son novios

-¿Y cuál es tu problema George?. Le pregunto Ringo entre risas por lo gracioso que se veía George

-Déjame en paz Ringo

-Creo que estas enamorado y por eso te torturas así con esa clase de suposiciones

-No, lo que creo es que es mejor no volverla a ver, no quiero ocasionar ningún problema en su relación

Ringo negó con la cabeza, divertido con toda la situación y se aparto de él, dispuesto a salir y dejarlo solo, eso era lo mejor. Después de todo, no era bueno que en un mismo lugar hubiera 2 personas, mal por un par de chicas.

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Victoria nunca antes lo había pasado tan bien con alguien, como lo hacía en esos mismos momentos, con Joseph, en medio de esa cafetería. El chico era muy divertido y su estilo de vida, según ella, era fascinante, así que ahí tenían una hora entera, conversando con solo un café a su lado.

-Es extraño ver todos esos espejos en una motocicleta. ¿No se te hacen incómodos?

-No, no estorban tanto como la gente cree

-¿Y desde cuando eres un Mod?

-Desde hace como 6 meses o algo así, ¿Por qué?

-Oh no, por nada, es que ahora está muy de moda todo eso

-Lo sé, este verano iré por primera vez a Manchester con mis amigos

-¿Y para qué?. Le pregunto Victoria, sin dejar que el terminara lo que iba a decir

-A un pub que hay allá, muy popular, desde hace un año se reúnen todos los Mods ahí

-Vaya, suena divertido

-Lo se

Vicky, tomo un sorbo de su café, antes de seguir con la conversación que tanto interés le daba. No obstante, Joseph se le adelanto y quiso preguntarle algunas cosas también.

-¿Desde hace cuanto trabajas para Mía Robinson?

-Desde hace muy poco

-Ya veo, aunque me imagino que no es muy fácil ser niñera

-Difícil no tanto, pero si muchas veces es aburrido, la niña es muy tranquila

-¿Ah sí?, no sabia

-Es una niña muy buena

-Tuviste suerte entonces

-Mucha, aunque mi amiga Layla dice que llevo un estilo de vida muy aburrido

-Sí, creo que tiene razón

-Oye….. Tampoco es para tanto, es solo que tengo muchas responsabilidades

-Un día te llevare con mis amigos a dar un paseo por la ciudad

-¿En la noche?

-Si, en la noche es mucho mejor

-No lo sé…….. Tengo que ir a estudiar

-¿Los domingos también?

-No, pero……….

-Entonces el próximo domingo en la noche iremos, te vas a divertir, vas a ver

No muy segura consigo misma y la idea en general, término aceptando, quizás ya era hora de divertirse un poco más. A veces le parecía no muy normal, que alguien de tan corta edad como ella se la pasara tanto pensando en su estudio y trabajo, la época simplemente no daba para eso……..

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Después de la cena y de acostar a su hija, salió al gran jardín trasero, con la intención de pasar un rato sola y de ver la luna que de a poco salía detrás de una nubes. No obstante, su plan se vio frustrado al ver quien estaba sentado en una de las sillas que había cerca de ella, pensando ahora si se acercaba y se sentaba a su lado o no.

-Buenas noches Mía. La saludo Jim,  con tono agradable

-Buenas noches Jim, no sabía que estaba aquí, será mejor que……..

-No, quédate, no hay problema

La chica obedeció, sentándose a su lado lentamente, a la vez que un silencio que al final duro varios minutos, se apoderaba del lugar y el frio era cada vez más insoportable.

-Su esposa es muy amable y dulce, muchas felicidades Jim

-Tuve suerte, ¿no es así?. Es una gran mujer

-Nunca me imagine que se iría a casar de nuevo y mucho menos de una mujer divorciada y ya con una hija

-No le veo nada de malo a eso, por eso me case con ella

-Espero que un día me encuentre a un hombre que me acepte igual

-Habrá alguno, yo lo sé, eres una gran chica, siempre me caíste bien

 -¿En serio?

-Sí, debo confesar que algunas veces deseaba que aceptaras a mi hijo y se casaran

-¿Casarnos?, nunca me vi casada con Paul

-Y ahora tienen algo más fuerte que los une

-Es verdad, Isa………. Es tan parecida a el

-Lo sé, pero también tiene su propia esencia

-En eso estoy de acuerdo

-Sabes, en serio es una lástima no haberla conocido desde el principio

-Supongo que no debí de ponérmele de rodillas a mi madre para que no fuera a decírselo

-¿Hiciste eso?

-Eso y más, no quería arruinar el sueño de Paul y mira ahora, valió la pena

-Creo que ser padre le hubiera sido más satisfactorio que ser un músico exitoso, pero ya todo eso quedo en el pasado y espero que se acostumbre pronto

-Sí, yo también lo espero Jim……

-No estoy enojada contigo, por si pensabas eso. Me alegra que hayas sido tu la que me diera el primer nieto

Mía sonrió, muy feliz de escuchar eso, por un momento en serio pensó que él estaba enfadado con ella, pero no, la realidad era otra y debía aprovechar todo eso para remendar todo lo que había provocado, esa vez cuando apenas era una chica inmadura y orgullosa.

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Capitulo dedicado a Paty Areli)? XD la cumpleañera del dia de hoy y mi mas grande fan :') 

Capitulo 21

La hora había llegado, el momento de irse y estar sola el tiempo necesario estaba ahí frente a ella, esperándola, mientras Mía, Cyn y hasta Isabelle con unas gafas de sol hechas a su medida, se despedían de ella en el aeropuerto. Ibiza seria el destino de Sarah esta vez, el destino que escogió para descansar y olvidar todo lo malo que le ocurría últimamente.

-Cuídate mucho Sarah, me llamas apenas llegues. Le dijo Mía, en su rol de hermana mayor

-Tranquila, es solo Ibiza no Hamburgo. Le contesto Sarah riendo un poco

-¿Cuándo volverás?

-Ya te dije que no lo sé. Le respondió en tono cansado. – Hasta pronto Cyn, cuídame mucho a la loca de mi hermana-

-Sarah, parece que estas en tus últimos momentos de vida, eres tan exagerada. Mascullo Mía, con el ceño fruncido

-Hasta luego Isa, cuida mucho esas gafas eh, aunque te haya comprando un par más. Le dijo Sarah a su sobrina, antes de darle un beso en la frente. –Y tu, cuida mucho mi departamento. – Le dijo después a Mía con una sonrisa

-Hasta luego Sarah. Se despidió Cynthia, mientras le daba un abrazo

Y así las 3 vieron como Sarah desapareció entre la multitud y lejos se despedía con su mano, tenía el semblante triste, pero aun sonreía y eso alegro un poco a Mía, que solo esperaba que le fuera bien y cumpliera su objetivo en ese tiempo que iba a estar lejos de Gran Bretaña.

Después de que salieron de ahí, se fueron a almorzar a un restaurante que no quedaba muy lejos del departamento de Sarah. Mía todavía no sabía que Cyn también se iría todo el próximo mes y la chica buscaba alguna manera de decírselo, ya que claramente Mía se quedaría sola en Londres bastante rato y quizás no le agradara mucho la idea.

-Ya arregle las cosas con John. Comenzó a decir Cynthia en un intento de no decirle lo de las vacaciones de un momento a otro

-Me alegro mucho. Le contesto Mía con una inmensa sonrisa

-Sí, solo falta que se disculpe contigo

-No te preocupes, John es así y si no lo hace ni modo

-Ha estado muy complaciente desde que le volví a hablar

-¿Ah sí?, pues disfrútalo porque dentro de poco se le ira eso de complaciente. Es muy bipolar

-Lo sé, pero aun así, me da gusto que ande así estos días, ayer me compro unas rosas y quiere que nos vayamos todo el mes que tiene de vacaciones a Hawaii y Tahití

-Eso es grandioso. Exclamo la chica muy feliz por Cynthia

-¿Te parece?. Pregunto Cyn un poco contrariada

-Claro, les hacía falta hacer eso desde hace mucho

No, no se había puesto triste por eso ni nada parecido, al parecer Mía en serio ya había madurado, aunque sin saber, Mía después se las arreglaría para no sentirse tan abandonada en medio de esa gran ciudad.

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Terminar de filmar la película, no significa para los chicos que inmediatamente podrían descansar, ya que ahí estaban en su segundo día de ensayo, para un programa especial que tendrían 2 días después en la televisión y donde les tocaría tocar algunas canciones y hacer un acto de Shakespeare poco después. Esto último significando más cosas que aprenderse, como siempre, aunque la compañía de Mal Evans y Brian los hiciera no agobiarse tanto.........

-Después de esto podrán hacer lo quieran, así que den lo mejor de ustedes. Les dijo Brian mientras los 4 afinaban sus instrumentos en medio del escenario donde les tocaría actuar

-Por lo menos el vestido de mujer que me tengo que poner, no esta tan mal. Comento John haciendo que todos rieran un poco

-No, solo yo me pondré un traje ridículo. Contesto Ringo con cara de desagrado

-Es que eres un encanto Ritchie

-¿Tu nueva novia vera el show?. Le pregunto Paul a George, ya que había escuchado que al chico supuestamente le estaba comenzando a gustar alguien

-No tengo novia Paul. Le contesto George, enojado

-Oh que mal, te la pasaras solo todo el mes, te traeré una chica de Hawaii como suvenir para que te consuele después. Le dijo John

-No gracias John

George aun no tenía claro si le gustaba Victoria o no y que sus amigos hiciera bromas sobre eso, no le gustaba nada, por lo que se paro y se fue, dejando extrañado al resto que no lo veían así desde hace mucho.

-Definitivamente esta enamorado. Dijo Paul mirando hacia donde se había ido el chico

 -¿Quieren que le pregunte qué le pasa?. Les pregunto Mal, un poco preocupado

-No Mal, déjalo así, ya volverá. Le respondió Ringo, sin mucha importancia

Y eso esperaban, porque aunque no les diera mucha importancia su comportamiento, les preocupaba que evadiera o negara tanto ese tema, cuando nunca antes lo había hecho, ni siquiera cuando era un adolescente.

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Mía llamo a Victoria apenas llego a la casa, se suponía que la chica no debía llegar ese día ya que era fin de semana pero le quería pedir ayuda para una idea que se le acababa de ocurrir, una gran idea según ella. Vicky intrigada, salió de su casa de inmediato, total se estaba aburriendo mucho en la suya y no le molestaba para nada ir ahora mismo, así que ahí estaba lista para escuchar la locura que a su jefe se le acababa de ocurrir.

-Qué bueno que has podido venir Victoria

-Bueno, ya sabes, estaba aburrida en casa. Le contesto la chica sinceramente

-Entonces empecemos ahora

-¿Con que?

-Mira, mi hermana se ha ido a Ibiza por no sé cuánto tiempo y tengo el departamento para mi sola. Comenzó a decirle Mía mientras se veía sus uñas

-Ah, no sabía

-Pues sí y pensaba en hacer una fiesta aquí el próximo viernes en la noche, para no aburrirme

-¿Una fiesta?. Le pregunto Victoria sorprendida

-Sí, una fiesta, quiero invitar a todos los que viven en el edificio y también a algunos compañeros de trabajo, pero eso último déjamelo a mi

-¿Y que se supone que tengo que hacer?

-Vas a ayudarme a invitar a los vecinos, los que no son casados o viejos, porque ya sabes que esos van a decir que no obviamente, nos dividiremos el edificio y dentro de una hora nos vemos aquí otra vez

-¿Y qué hay de Isabelle?

-¿Qué con ella?

-¿Va a estar en la fiesta?

-No, tú la cuidaras esa noche  querida, eres su niñera, ¿no?

-Claro…..

La chica, no estaba muy convencida con esa idea, Mía haría una fiesta aprovechando que su hermana no estaba, jamás se imagino que podría hacer algo así, pero tenía que aceptar, así que después de que Mía le dijera cuales puertas tocar y ya les diera la invitación a unos cuantos, se vio frente a una de las ultimas, un poco nerviosa como desde el momento que comenzó con todo eso.

-Hola Buenas tardes. Saludo la chica amablemente, al hombre que acababa de abrir la puerta

-Buenas tardes señorita, ¿Qué se le ofrece?

-Me llamo Victoria, vengo en nombre de la huésped del departamento 33

-Ah sí, la modelo

-No ella no, su hermana

-No sabía que la chica que vive con ella ahora, es su hermana

-Sí, lo es

-Es muy amable, más que la que es modelo, ¿le sucedió algo?

Pero Victoria no pudo acabar de decirle, ya que un chico algo mayor que ella, los interrumpió al pasar en medio de ambos para entrar al departamento, a la chica le pareció muy descortés por lo que no hizo muy buena cara y el hombre con el que hablaba tampoco.

-Joseph, pero que son esos modales, ¿no vas a saludar?

-Ah sí, no la vi papá. Le contesto el chico, volviendo a ver a Victoria de pies a cabeza. – Hola-

-Hola. Saludo Vicky, tímidamente

-Y bueno, ¿en qué quedamos?. Le pregunto el hombre

-Ah sí, bueno ella está planeando una fiesta en su departamento el viernes en la noche y me pidió que lo invitara

-¿Una fiesta eh?, no suena tan mal. Dijo Joseph que todavía no se había ido de ahí

-Sí, pero a mi es al que invitan no a ti. Dile a la Señorita Robinson que estaré ahí mañana y que gracias por la invitación

-Perfecto, hasta luego entonces

-Hasta luego

El chico, se quedo en la puerta mirando a Victoria, algo intrigado, no porque le gustara sino porque le parecía interesante y era una lástima que su padre no lo dejara ir a la fiesta a la que lo habian invitado, aunque esperaba volverla a ver. Vicky mientras tanto, al ver que ya una hora había pasado, llego de nuevo al departamento, donde ya estaba Mía esperándola, algo impaciente.

-Al fin llegas

-Lo siento, me atrase un poco con el vecino de al lado, creo que estaba pasado de copas

-No importa, ¿acepto la mayoría?

-Sí, gustosos

 -A mi también, creo que la fiesta será un éxito

-Ya lo creo

-Gracias por tu ayuda Vicky, te pagare extra te lo prometo

-Gracias Mia, pero no hace falta

-Claro que si, espero que tengas esa noche para que cuides a Isa

-Sí, si tengo libre, no tengo que ir a la universidad los viernes

-Bien

Y sin que se diera cuenta del todo, Mía estaba volviendo a sus años de chica rebelde y despreocupada……………

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Ringo, al enterarse que Sarah se había ido, lejos, se dio por vencido, la chica jamás volvería con él, jamás y se sentía culpable por haber hecho lo que hizo en el tour pasado.

-¿Qué te pasa?. Le pregunto George con el ceño fruncido al entrar a la sala y verlo ahí sentado con cara de pocos amigos

-Sarah se fue

-¿A dónde?

-No sé, lo escuche cuando nos estábamos yendo del salón Remembrance

-Quizás solo se fue de vacaciones

-Sí, quizás. Musito el chico, no muy convencido

George se sentó a su lado y le ofreció un trozo del chocolate que estaba a punto de comer, nunca antes había visto a Ringo tan mal por una mujer y lo único que esperaba era que todo se resolviera pronto.

-Creo que aceptar vivir contigo, no fue tan mala idea. Dijo Ringo riendo un poco, mientras comía su chocolate

-Lo sé y sabes, ya volverá, conozco a Sarah, no va a aguantar estar lejos de casa tanto tiempo

-Espero que tengas razón George, nunca pensé que lo de las groupies en las giras me traería problemas

-Pues es un riesgo y existen las consecuencias, tu estas teniendo una ahora

Tenía razón, pero, ¿estaría Ringo dispuesto a seguir acostándose con chicas en las giras como el resto hacia?, eso solo el tiempo lo diría y también el valor que podía tener para aguantarse.

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Esa semana, paso bastante rápido para todos, incluyendo Mía, que ya estaba lista para la fiesta, al parecer llegaría mucha gente y después de ir a dejar a su hija donde Victoria, se alisto con el vestido que compro hace poco y comenzó a ver como poco a poco llegaban los invitados, entre ellos Thomas, que había invitado hacia unos días, algo indecisa por la reciente confesión del chico.

-Hola linda, traje whiskey, espero que te guste. Le dijo el chico levantando la botella que traía

-Sí, me gusta un poco. Le contesto la chica, algo tímida

-¿Invitaste a todos los vecinos?. Pregunto Thomas gracioso, viendo hacia la puerta

-A la mayoría, si

-Estás loca Mía

-Ya lo se

Thomas podía tener razón, pero lo que no podía negar era que la fiesta con cada minuto que pasaba, se ponía mejor, llegando al punto de tener el departamento lleno de gente, que casi no se podía mover ni caminar por el corto espacio, pero que aun así disfrutaba y hablaba animadamente. Mía definitivamente era una buena anfitriona, no obstante, el chico al ver que casi no había podido hablar con ella, camino hasta ella con dificultad y la jalo del brazo hacia un armario cercano.

-¿Qué te pasa ahora?. Le pregunto la chica molesta e incomoda

-Casi no te he visto esta noche. Le respondió Thomas con una dulce sonrisa

-Thomas, tengo invitados que atender

-Déjalos, ellos se pueden divertir solos

-Thomas, no empieces

-¿Pensaste en lo que te dije aquel día?

-Tom, me encantaría sentir lo mismo, pero solo te veo como un amigo

El chico la miro a los ojos, profundamente, haciendo que ella hiciera lo mismo, hasta que el sonido del teléfono la sacara de su trance y dejara a Thomas ahí solo, a la vez que trataba de llegar al teléfono que estaba al otro extremo de la sala, no teniendo más opción, que ir gateando entre toda esa gente, rápidamente.

-Hola?

-Mía, habla Paul

-Paul, ¿Cómo estás?. Pregunto Mía con una gran sonrisa

-Bien, ¿interrumpo algo?. Pregunto esta vez Paul al escuchar mucha gente de fondo

-No, nada. Le respondió Mía rápidamente, mientras miraba a su alrededor

-Ahhh bueno, yo llamaba para decirte que ya hice planes con una agente de bienes raíces para lo de la casa, iremos el lunes en la mañana, ¿te parece bien?

-Me parece muy bien Paul, aunque tampoco te deberías de apresurar tanto con ese asunto

-Lo que sucede es que quiero hacerlo antes de que me vaya de gira

-Ahhh si, la gira

-¿Entonces el lunes?

-Sí, el lunes, nos vemos Paul

-Hasta pronto Mía

Aun extrañado por el ruido que escucho toda la conversación, Paul colgó el teléfono, también complacido de que Mía estuviera dispuesta a empezar con todo eso el lunes que se aproximaba. Jane todavía no sabía nada y aunque no tenía idea de cómo decírselo, aunque sabía que no le molestaría para nada, decidió arriesgarse y buscarla para contarle sus planes, no teniendo la oportunidad, ya que ella lo sorprendió por detrás casi al instante.

-Oye, no sabía que andabas por aquí

-No lo estaba, acabo de bajar. ¿Con quién hablabas?

-Con Mía

-¿Con Mía?

 -Sí, lo que pasa es que quiero comprar una casa para que vivan ella e Isa cómodas, no me gusta mucho la idea de que la niña viva tanto tiempo con Sarah

-¿Y por qué no?

-Porque quiero que tenga su propia casa Jane, que crezca en una casa propia y además, un departamento no es adecuada para una niña tan pequeña

-Oh Paul, tu siempre tan galante y bueno

-¿No te molesta?

-¿Y porque me va a molestar?, es tu hija, ¿no?

-Pues sí, pero…….

-Pero nada cariño, me agrada la idea

Jane le guiño el ojo como señal de que de verdad no le molestaba en lo absoluto y luego le dio un beso, que el de inmediato correspondió. No, al parecer su nuevo título de padre, no afectaría en nada su relación.

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El lunes en la mañana, Mía dormía plácidamente en su cama,  no parecía despertar pronto y era justificable ya que después de que la fiesta fuera todo un éxito, se mantuvo limpiando todo el fin de semana y quería aprovechar que había pedido libre ese día por medio de Thomas, olvidándose de la razón oficial hasta que el timbre la despertó e hizo que se levantara un poco enojada, con el cabello revuelto y una bata muy corta.

-Paul, ¿Qué haces a esta hora tan temprano?. Pregunto la chica sobresaltada al verlo ahí parado tranquilamente

-Te dije que vendría hoy para ir a ver las casas, ¿recuerdas?

-Pero no sabía que vendrías tan temprano

-Oh bueno, son las 8, pero igual lo siento. Le contesto Paul, muy apenado

-No te preocupes, pasa

Se fue apresurada hasta su habitación, a la vez que Paul la seguía, aun apenado. Abrió el armario y saco un vestido rojo que llegaba hasta las rodillas, no le gustaba mucho pero no se podía poner a buscar algo mejor con lo tarde que ya era, así que quitándose la bata, con Paul en frente, comenzó a vestirse, el chico volteo su mirada de inmediato, al darse cuenta que no llevaba nada puesto, la había visto desnuda muchas veces pero aun así le incomodaba.

-Paul, no sabía que seguías aquí. Mascullo Mía escandalizada, al verlo ahí en frente suyo

-Lo siento, ya me voy. Dijo Paul saliendo casi en el acto, mientras cerraba la puerta

Minutos después, la chica salió ya lista, dándose cuenta que Paul había ayudado a la niña a vestirse y ya estaba más lista que ella.

-¿Ya?. Le pregunto Paul viéndola de pies a cabeza un poco embelesado por lo bonita que se veía con el cabello recogió

-Sí, ya esta y veo que Isa también, se levanta más rápido contigo que conmigo

-Supongo que es porque tengo más carácter

-Sí, seguro

Y si que era seguro, ya que toda la mañana que anduvieron con la agente de bienes raíces, la niña se porto mucho mejor que cuando andaba solo con su madre. Mía mientras tanto, se había enamorado de todas las casa que visito y ahora estaba indecisa viendo la ultima, que al parecer era la ideal, estaba en un muy buen barrio de Londres, cerca de su trabajo, parecía estar muy cara pero por lo que veía a Paul no le importaba para nada el precio y eso la avergonzaba, ya que no quería aprovecharse económicamente de él y sentía que todas esas atenciones no eran necesarias , aunque vivir por fin en un lugar propio, era algo que se lo agradecería muy pronto…………