Capitulo 17

Mía entro al lugar, apresurada, queriendo encontrarse con John directamente. Le iba a dar su merecido por chismoso, aunque su hermana y hasta Cyn que también venia con ellas, trataban de calmarla, mientras caminaban detrás suyo.

-Mía, ¿Qué vas a hacerle?. Le preguntaba Cyn asustada

-No es de tu incumbencia. Le contesto la chica, furiosa

-No hagas estupideces, vas a armar un escándalo. Le decía su hermana, preocupada

-No te metas Sarah, ustedes bien saben que el cabron de Lennon se lo merece

Al llegar a los camerinos de los chicos, Mía entro sin tocar y comenzó a buscar a John con la mirada, frente a un Ringo atónito y un George y Paul confundidos. Por fortuna para ella, no tuvo que esforzarse mucho en su búsqueda, ya que John salió del baño momentos después, viendo al instante como Mía iba hacia él y luego le daba una fuerte bofetada, reaccionando inmediatamente al levantarle la mano y tratar de devolvérsela…….

-Ni te atrevas John. Le dijo Paul interponiéndose entre los 2 apenas vio que John le iba a pegar a la chica

-Maldito chismoso, has arruinado mi vida. Le  grito Mía a John, tratando de tirársele encima para pegarle otra vez

-Mía por favor, cálmate. Trataba de decirle su hermana, muy avergonzada por semejante escena

-¿Chismoso yo?, por lo menos no soy un mentiroso. Grito John, enfurecido al igual que ella

-Le dijiste a Paul la verdad, se suponía que no debía de saberlo todavía, lo has arruinado todo. Contesto Mía, soltando unas lagrimas

-Ya basta los 2. Mascullo Paul histérico, tratando de terminar la discusión absurda que tenían. – Mía vamos, tu y yo tenemos que hablar

La saco de ahí, mientras la jalaba del brazo y ella trataba de soltarse, todavía no había acabado con John según ella.

-¿Cómo te atrev…………….

-Shhh cállate,  ¿quieres?. Le dijo Paul, poniendo su dedo en los labios de la chica para que no dijera nada más en ese estado

-No, no me callo. Voy a matarlo, juro que lo voy a matar Paul. Respondió Mía, sentándose en una silla que estaba en el cuarto donde Paul acababa de encerrarla con el

-No tú no vas a hacer nada, tienes que tranquilizarte Mía

-Odio los chismosos y John es uno de ellos

-Mira el lado positivo, ya se la verdad, ya no tienes que pasar con esa carga en los hombros mas tiempo. John te ayudo de cierta forma

-Tú ni siquiera me crees. Le dijo Mía, comenzando a llorar

-Oye, no llores. Yo si te creo. Le contesto Paul, poniéndose de rodillas frente a ella

-Ayer no me creías, ¿Por qué ahora sí?

-Discúlpame, te trate muy mal, dije cosas que no debí decir

-¿Por qué ahora si me crees Paul?. Volvió a preguntar la chica, contrariada

Paul den vez de responderle, se acerco a ella para abrazarla fuertemente, a la vez que Mía comenzaba a llorar otra vez y el comenzaba a tranquilizarla, acariciándole la cabeza.

-Ahora te creo, porque lo siento en mi corazón. Le dijo Paul por fin, casi en un susurro inaudible

-No entiendo. Contesto Mía, separándose de el lentamente

-Anoche, pensándolo mejor, descubrí que Isabelle si es mi hija, tienes razón, todo concuerda con lo que paso aquella noche y la verdad es que ella se parece mucho a mi

-Son idénticos. Le dijo Mía, finalmente riendo

-Me gustan los niños, pero jamás pensé o tenía planeado ser padre a esta edad, por eso reaccione de esa manera. Lo siento

-No Paul, tu perdóname a mí, yo debí de decírtelo, pero no pude……..

-¿Por qué no?, yo hubiera aceptado y me hubiera hecho responsable

-Pensaba que era mi culpa y tampoco quería arruinar tu sueño, ni el mío. Los 2 teníamos caminos diferentes

-La culpa es de los 2 y aun así no es tan tarde, me hare responsable de Isabelle, le voy a dar mi apellido y te voy a ayudar económicamente

-No Paul……

-Shhh, tienes que aceptar, ¿entiendes?. Debo hacerme cargo también

-Pero va a afectar tu carrera y yo no quiero

-No va a afectar nada, podemos mantenerlo en secreto un tiempo como lo hicieron John y Cyn con Julian

-¿Y si lo descubren?, ¿Qué va a pasar?, tengo miedo

-No, no tengas miedo, ni pienses en eso. Piensa solo en Isabelle, en su bienestar, yo te voy a ayudar en todo, iré a verla cuando tenga tiempo y estoy seguro que a Jane le caerá muy bien la niña. Todo estará bien

-Siempre has sido tan bueno conmigo

-Eres la mujer que ame mucho una vez, es lo que menos puedo hacer.

Mía le dedico una sonrisa, a la vez que ella era ahora la que lo abrazaba, esta vez feliz de que todo se estuviera resolviendo y Paul aceptara todo. Aunque le fuera un poco raro, escuchar, que la amo y no la ama como tantas veces se lo dijo alguna vez…..

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Su amiga estaba sorprendida de escuchar todo eso, con solo saber que ya había conocido a los Beatles en su trabajo, hasta  ya quería saber más, sobre todo cuando le conto que George la llevo a su departamento la noche anterior.

-Y, ¿Cómo es?

-Oh Layla, ya te dije, es agradable. Le contesto Victoria, ya cansada de escuchar a su amiga solo preguntarle sobre esas cosas

-Y guapo, ¿no es así?

-Pensé que no te gustaban los Beatles

-No me gustan, pero admito que son guapos, muy guapos

Victoria la miro con desagrado y siguió comiendo las galletas que hacía poco había ordenado en la cafetería donde se cito con Layla, mientras cuidaba a Isabelle, que estaba en frente suyo también comiendo una galleta.

-Veo que no me vas a decir nada más

-No hay nada más que hablar Layla. Le dijo la chica con la boca llena

-¿Te gusta?, si te gusta George Harrison. Vicky, te conozco desde hace mucho y se te nota

-No me molestes y no, no me gusta

-¿Y por qué no?, si es atractivo, famoso y millonario. Es el hombre perfecto

-Eso no debería de ser lo importante en un hombre

-Pero si lo principal

-Tampoco

Victoria siguió evitando el tema el resto del rato que estuvieron ahí “conversando”, se le hacía muy incomodo ese tema, George le parecía interesante, un chico diferente al resto que había conocido, pero en serio no le gustaba, ni tampoco su fama.

-Pronto caerás Vicky. Le grito Layla en broma, cuando salieron de la cafetería y se fueron en direcciones opuestas

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 Todos estaban todavía reunidos en el camerino, tratando de entender lo que pasaba ya que para George y Ringo era imposible que Paul fuera el padre de esa niña. John se encontraba con su mejilla roja, fumando un cigarrillo algo lejos de los demas, ignorando la conversación, a la vez que Cyn se sentaba a su lado y lo miraba preocupada.

-¿Dónde lo descubriste John?. Le pregunto la chica sorprendida

-Una carta, registre tus cosas un día y ahí estaba y la leí. Le respondió John sinceramente, ahora más tranquilo

-¿Por qué lo hiciste?, yo no hago eso con tus cosas

-Ya se Cyn, pero estaba intrigado. ¿Has visto a esa niña?, no tiene nada de Mía

-Pues sí, se parece mucho a Paul, pero no era para que llegaras a ese extremo

Sarah se levanto de  donde estaba sentada y se acerco a John, para obligarlo a que se disculpara con Mía, sabia muy bien que a él le sería difícil hacer una cosa de esas, pero si no le apetecía, entonces lo obligaría.

-Ya que eres tan entrometido con las cosas de tu esposa, espero que también tengas el coraje para pedirle disculpas a mi hermana

-Yo no debo pedirle disculpas a nadie, se lo merecía. Le contesto John con el ceño fruncido

-Claro que no, si no le conto nada a Paul fue para proteger a Isabelle y hasta a el mismo

-Lo pensare……

Indignada con el comportamiento de John, se dio media vuelta, dispuesta a salir de ahí para no verle la cara más. Ringo al verla irse, la siguió, un poco preocupado con toda esa situación.

-Hey, espera Sarah

-Déjame, quiero estar sola. Refunfuño la chica, sin parar de caminar

-Oye, tranquilízate cariño. Ya sabes cómo es John, no le hagas caso. Le dijo Ringo, parándose en frente de ella para tratar de calmarla

-Ojala fuera tan fácil, pero no me sorprende, siempre ha sido un bastardo

-Ya le pedirá disculpas a Mía, no creo que pronto, pero si algún día

-Discúlpame, no quería que supieran de todo ese embrollo de esa manera

-No te preocupes, aunque debo admitir que estoy bastante sorprendido con todo eso

-Ya ves, todo es bastante complicado

-Cuando Brian se entere……..Mascullo Ringo, todavía mas preocupado

-Yo se que Mía no permitirá que el haga algo contra Paul

-No le hará nada, pero si le dará el regaño de su vida

-Espero que no. Musito Sarah, viendo la puerta que daba hacia la habitación donde estaban Paul y su hermana

-Sabes, pensaba que después de salir de aquí podíamos ir a algún lado

-Me gusta la idea. Le contesto Sarah con una gran sonrisa

-Creo que tenemos que despejar nuestras mentes aunque sea un rato pequeño

La chica sonrió por el último comentario de su novio, antes de agarrarlo de la mano y volver al camerino. La verdad es que el tenia razón y debía empezar por no mortificarse más con John o algo relacionado a ese tema.

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Las cosas habian quedado bien con Paul, mejor de lo que pensaba y ahora después de ir a trabajar unas cuantas horas, estaba ahí en el departamento de su hermana, junto con su hija, esperándolo. Le había dicho que llegaría esa tarde para ver a la niña y aunque se sentía un poco nerviosa por eso, también estaba muy ansiosa ya que seria el primer encuentro de la niña y Paul como padre e hija.

-No te ensucies y pórtate bien. Le dijo Mía a la niña, mientras le ponía un vestido que le compro hace poco

-No me gusta. Se quejo Isabelle, por lo incomoda que se sentía con eso puesto

-¿Cómo no?, pero mira qué bonito que es y te ves hermosa

-Noooo. Exclamo la niña, un poco enojada

-No te pongas así, por favor. Apenas la visita se vaya, te lo quitare

-Está bien. Le contesto la niña bajando la mirada

En esos momentos, apenas la termino de vestir, el timbre sonó, sobresalto a las 2, que se dirigieron a la puerta muy calmadas para ver de quien se trataba, aunque ya Mía lo sospechaba.

-Paul. Exclamo la chica muy feliz apenas vio que era él. – Has venido ya, que puntual-

-Siempre soy puntual, ¿Cómo estás?. Le pregunto el chico entrando al lugar, un poco nervioso

-Muy bien. Respondió la chica, observando cómo su hija se les quedaba viendo con una sonrisa traviesa

Paul rio por la sonrisa de la niña y se acerco a ella, agachándose para ponerse a su nivel. Isabelle se le quedo mirando ahora seria, pero tranquila, cosa otra vez que sorprendió bastante a Mía, ya que por lo general Isabelle corría hacia ella cuando un extraño se le ponía en frente.

-Hola Isabelle, ¿me recuerdas?

-Sí, hola. Le respondió la niña a Paul, sonriendo otra vez

-Es un gusto verte de nuevo, te ves muy hermosa con ese vestido

-Gracias. Contesto Isabelle, muy tímida

Paul la alzo para darle un fuerte abrazo, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas y le daba un beso a la niña en la mejilla. Era su hija, lo podía sentir, a la vez que se arrepentía muchísimo de haberla rechazado el día anterior, ya que le parecía la niña mas buena y dulce del mundo.

-Jamás la había visto tan calmada con un extraño. Le dijo Mía al chico con una media sonrisa

-¿En serio?, entonces soy afortunado. Le contesto Paul, riendo un poco

-¿Ya la viste mejor?, tiene tus ojos

-Sí, ya los vi, es extraño

-Creo que eso lo comprobaría más que una prueba de sangre

-Sí, estoy de acuerdo. Le dijo Paul, bajando a la niña de nuevo al suelo

-Ven, vamos. Le dijo Isabelle a Paul, mientras le jalaba uno de los dedos de su mano

-¿A dónde?. Le pregunto el intrigado

-Vamos. Insistió la niña, lográndolo esta vez ya que Paul comenzó a seguirla a su habitación.

Paul se sentó en la cama, mientras la veía sacar una caja, adornada con abalorios, ahí tenia guardadas sus muñecas por lo que vio poco después, a la vez que escuchaba la risa de Mía desde la puerta.

-¿Pasa algo?. Le pregunto Paul extrañado

-Quiere jugar contigo a las muñecas. Le respondió ella, otra vez riendo

-¿Y eso qué?. Pregunto otra vez Paul. – Si es así, jugare de eso con ella, no le veo ningún problema-

-Perfecto, entonces los dejo solos. Le dijo la chica cerrando la puerta enseguida

El resto de la tarde y parte de la noche, Paul y la niña se mantuvieron ahí jugando de muchas cosas. A Paul le encantaba jugar con niños pequeños y no quería desaprovechar la oportunidad de hacerlo con su hija un buen rato, de todos modos, así compensaría todo el tiempo que estuvo ausente. No obstante, apenas el reloj marco las 7:30, a la niña le dio sueño y el mismo fue a acostarla y esperar a que se durmiera, todo ese rato sin verse interrumpido por nadie, mucho menos por Mía que se dedico a hacer cosas de su trabajo y ahora estaba en la sala leyendo su libro favorito.

-Al parecer le agrade bastante. Comento Paul, apenas entro en la sala

-¿Ya se durmió?. Le pregunto la chica apenas levantando la mirada del libro

-Sí, no quería que me fuera hasta que se durmiera

-Creo que va a ser un poco complicado decirle que eres su padre

-No hay que decírselo, simplemente demostrárselo

-Entonces espero que funcione

-Funcionara, estoy seguro

-Gracias por haber venido Paul. Le dijo la chica, levantándose del sillón

-No agradezcas nada, me agrado bastante pasar un tiempo con ella. Aunque creo que ya me tengo que ir, Jane debe de estar esperándome para cenar

-Claro, entonces hasta pronto

-Por supuesto, hasta luego Mía. Se despidió Paul, dándole un beso en la mejilla antes de encaminarse a la puerta e irse de ahí.

Mía se quedo parada, viendo se iba y desaparecía de ahí otra vez. Estaba sola de nuevo en medio de ese gran departamento, su hija dormía y Sarah no se encontraba, quedando ella ahí pensativa pero a la vez feliz de ver como empezaba una gran relación entre Isabelle y Paul.

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Paul llego a su casa, muy cansado, pero tratando de ocultarlo, ya que ahí estaba Jane otra vez esperándolo, con esa sonrisa que la caracterizaba tanto.

-¿A dónde estuviste?. Le pregunto la chica después de que el la saludara con un beso

-Visitando a una vieja amiga. Le contesto mientras se quitaba el saco y la corbata

-¿Amiga?, me hubieras avisado que no llegarías a cenar

-¿Ya cenaron?, oh disculpa cariño, es solo que el tiempo se me paso muy rápido

-No importa,  yo si te espere

-¿No has cenado todavía?. Pregunto Paul confundido

-No, quise esperarte

Paul le dedico una sonrisa justo antes de darle otro beso y luego dirigirse con ella al comedor donde ya todo estaba servido. Parecía la ocasión perfecta para contarle todo lo ocurrido a su novia, así que después de un rato de comer en silencio comenzó a hablar, un poco nervioso ya que no tenía idea de cómo reaccionaría ella con esa noticia.

-¿Pasa algo?. Le pregunto Jane al ver que se quedaba pensativo y no hablaba de nada mas

-Jane, hay algo que quiero que sepas pero que necesito que lo tomes bien. Le dijo Paul mirándola a los ojos algo inseguro

-Vamos Paul, no creo que sea algo muy grave

-Pues no lo sé, eso depende de ti

-¿Qué quieres decir con eso?. Pregunto la chica contrariada

-¿Recuerdas a Mía?, la hermana de Sarah

-Si por supuesto que la recuerdo

-Recuerdas que yo te conté un día que ella y yo fuimos novios, tuvimos una historia muy complicada

-Sí, eso también me acuerdo. Respondió la chica cabizbaja

-Jane, en serio necesito que tomes esto bien. Le volvió a decir Paul, indeciso

-Paul, cuéntame, que pasa

-Ayer me entere que, la embarace hace un par de años

-¿Cómo?

-Si Jane, tengo una hija con ella y no lo sabía. Le contesto Paul, soltando un bufido después

Jane no lo podía creer, jamás se imagino que Paul fuera el padre de alguien, que ya fuera papá y eso la llenaba de inseguridad pero a la vez de felicidad por él, ya que quería apoyarlo lo máximo posible con todo eso.

-Que sorpresa, en serio

-Ya sé, no podía creerlo, simplemente me parecía imposible, pero después de pensarlo más me di cuenta que esa niña si es mía Jane

-Paul, no te preocupes, yo no voy a romper contigo por una cosa de esas

-¿En serio?

-En serio, te amo y tampoco me parece tan malo que seas padre

-La verdad que a mí tampoco

-¿Qué vas a hacer?, ¿los chicos ya lo saben?, ¿y Brian?

-Ya ellos lo saben, pero Brian no y no sé cómo decírselo tampoco

-Pues hazlo pronto, el debe de saberlo en seguida

-Lo sé, pero primero necesitaba decírtelo a ti, eres muy importante en mi vida

-Tú también lo eres en la mía, espero conocerla muy pronto eso si

-Tienes que verla, es muy simpática  

-Igual que tu, entonces definitivamente me caerá muy bien

-Gracias Jane, gracias por comprender. Le dijo Paul, dándole un beso en la mano

Para ambos era difícil esa situación, pero se amaban y estaban dispuestos a superar esas cosas para seguir juntos, aunque a Jane le decepcionaba no ser la primera en darle un hijo a Paul. Sin embargo, muchas cosas cambiarían entre ellos de ahora en adelante, algo que los llevara a descubrir cosas que cambiaran su vida, para siempre.

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Ya muy tarde en la noche, Sarah llego a su casa feliz, muy feliz de estar enamorada como nunca en su vida. La pasaba tan bien con Ringo que hasta el tiempo pasaba bastante rápido cuando estaban juntos. No obstante, apenas entro a su edificio, el guarda de la entrada la hizo parar, al parecer tenía algo para ella.

-Señorita Robinson, muy buenas noches

-Muy buenas noches para usted también, ¿pasa algo?

-Sí, me entregaron esto hace un rato, lleva su nombre. Le contesto el hombre, entregándole una pequeña caja de cartón color azul

-¿No sabe quien fue?

-No, no parecía ningún conocido suyo, al principio dude si recibirlo o no pero el tipo insistió, dijo que no era nada malo

-Bien, entonces gracias por entregarlo, hasta luego

-Buenas noches Señorita

Subió a su departamento, observando la caja con curiosidad y cuidado, pensaba que era algún admirador o algo así, pero apenas encendió la luz del comedor y la abrió, pudo ver su contenido claramente. Una hoja de papel que decía “Miami” y luego una foto de Ringo con una chica en sus piernas. Se quedo estupefacta mirando la foto una y otra vez, simplemente no lo podía creer, ver a su novio de esa manera con alguien que no era ella, le molestaba muchísimo y por fin, sus dudas se vieron confirmadas, Ringo si le era infiel en las giras y eso era algo que no podía ni debía tolerar.

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Hola otra vez, aqui estoy con este nuevo capitulo donde al fin se arreglan un poco las cosas, aunque nuevos problemas se acercan, ¿recuerdan la infidelidad?, bueno, ha vuelto, soy tan dramatica que no puedo dejar esas cosas de lado jajajajajajajajjaja espero que no hayan odiado demasiado a Paul en el capitulo anterior, ya a John le di su merecido en este XD a ver si se disculpa, es mas, les dejo en sus manos esa decision, ¿creen que si vaya a disculparse como un caballero?, ¿o lo deje todo asi?, ustedes escojan cualquiera de las 2 y la mas "votada" la pongo. Patricia, perdon por no publicar el viernes, yo ya te explique porque no puedo publicar seguido asi que espero que entiendas, si en serio era tu cumpleaños, pues este es el regalo entonces ;). Saludos a todas y espero que les haya gustado el capitulo....

Capitulo 16

Al escuchar eso que le acababa de decir John, se quedo contrariado y estupefacto, mirando a John que lo veía con rabia. Quiso pensar que todo se debía al enojo que llevaba encima el chico, pero algo en el mirar de su amigo, decía otra cosa y decidió disipar la duda que comenzaba a apoderarse de el en esos momentos.

-¿Qué?

-Lo que escuchaste, eres el padre de esa niña Paul. Le volvió a decir John, ahora más calmado

-Tiene que ser una broma. Musito Paul, mirando al suelo, todavía estupefacto y confundido

-Ya quisiera, pero no, lo descubrí hace poco

-No John, tiene que ser una broma, mentira. Dijo Paul negando con la cabeza insistentemente

-Paul, te paso lo mismo que a mí, solo que tuviste más suerte

-No John, yo no soy papá, esa niña no es mía, el padre tiene que ser algún franchute ex novio de Mía

-Paul, mírame a los ojos, no te estoy mintiendo. Le dijo John, muy arrepentido de habérselo dicho por accidente

Paul lo hizo, inseguro, todavía negando con la cabeza. Simplemente no quería que fuera cierto, amo a Mía mucho, pero ya era parte de su pasado y por el momento hasta le parecía imposible que eso haya pasado. Aun así, se quedo mirando a su amigo por un momento, ninguno sin decir nada, la mirada de John era sincera y también de lastima, al chico le dolía ver a Paul en esas circunstancias  y lo que más quería en esos momento era retroceder el tiempo para no haberle dicho nada y seguir como todo iba normalmente, aunque en el fondo sentía que ya era tiempo de que Paul se enterara.

-¿Cómo lo descubriste?. Le pregunto Paul, aun incrédulo

-Lo leí en una carta que encontré en las cosas de Cyn, era una carta que le mando Mía hace 2 años, meses después de que nosotros fuéramos a Paris por mi cumpleaños y casi 2 meses antes de la muerte de Stu

-Esa noche, la de tu cumpleaños. Mascullo Paul enfurecido

-¿Qué paso esa noche?. Pregunto John contrariado

-Me acosté con ella cuando la fui a dejar a su casa, pero no, aun así es imposible, esto tiene que ser una trampa de ella que aun quiere hacerme la vida imposible

Paul enfurecido, empezó a caminar hacia la puerta principal para irse y encarar a Mía, pensaba que todo era realmente una trampa, una mentira, un plan de ella para arruinarle la vida y quería verla a los ojos mientras le decía que nada de eso funciono.

-¿A dónde vas?. Le pregunto John caminando detrás de Paul rápidamente

-A donde Mía. Contesto Paul antes de salir directo a su auto

John se quedo parado, mirando cómo se veía, mientras esperaba que todo saliera bien. En serio se arrepentía mucho de habérselo dicho en esas circunstancias y ahora solo le quedaba apoyar a su amigo con lo que fuera que viniera, respecto a eso……

Paro a un lado de la vía, minutos después de haber partido de la casa de John. Lo que el chico le había dicho, le daba muchas vueltas en la cabeza, ahora ya no podía dejar de pensar en esa posibilidad, ni siquiera en Mía, que compartía tantas memorias con él……….

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9 de octubre de 1961

Verla reír al otro lado de la sala, hablar y jugar con su cabello, podía ser uno de los pasatiempos de Paul, que ahí estaba junto a ella, en el cuarto de hotel que compartía con John, mientras celebraban el cumpleaños de este último, que ahora estaba borracho, seguro en el baño vomitando, a la vez que el estaba ahí solo, observando a la chica de sus sueños, mientras fumaba un cigarrillo y deseaba estar en el lugar de Jurgen, allí al lado de la chica, hablando de cualquier cosa.  No obstante, al observar con más cuidado, se dio cuenta que la chica tenia frio, mucho, así que viendo la oportunidad, se saco su chaqueta y se acerco a ella, poniéndosela sobre sus brazos, con delicadeza.

-Tienes frio. Dijo él, al ver que ella lo miraba contrariada

-Gracias Paul, pero no hacía falta. Le contesto ella, con una sonrisa

-Claro que hacía falta, no voy a dejar que te mueras de frio

- De todos modos ya me voy, es muy tarde

-¿Ya te vas?, si quieres te acompaño. No me gustaría que anduvieras sola en la calle a estas horas

Mía se quedo pensándolo, hasta que finalmente acepto, encaminándose junto a el hacia la puerta, mientras se despedía de Jurgen.

-Espero que John este bien. Dijo Mía, cuando ya iban en la calle caminando

-Lo estará, lo he visto peor y sobrevive

-Eso espero. Le contesto Mía a Paul, un poco preocupada

 -¿Te divertiste hoy?. Le pregunto el chico, acomodándole su chaqueta

-Mucho, debo admitir que me hacían bastante falta. Que lastima que George no pudo venir

-Si bueno, a nosotros también nos gusto mucho verte, te extrañaba mucho Mía

La chica se quedo callada el resto del camino, después de escuchar esto último que dijo Paul. Ella sabía a la perfección el amor que él sentía por ella y no le apetecía darle más alas, aunque le atrajera bastante.

-Bien, llegamos. Le dijo la chica a Paul apenas pararon frente a un gran edificio

-Me dio gusto verte

-Yo también Paul, yo también te extrañaba. Musito Mía tímidamente, dándole poco después un beso en la mejilla

Paul al sentir el beso, se quedo con los ojos cerrados, mientras sentía miles de mariposas en el estomago. Pero al reaccionar y volverla a ver a los ojos, a esos ojos tan hermosos que ella poseía, la acerco a él y la comenzó a besar en la boca, apasionadamente. Mía no se pudo resistir, correspondiéndole casi en el acto hasta que se separaron minutos después para tomar aire.

-¿Quieres entrar?. Le pregunto Mía, casi en un susurro por lo cerca que se encontraban

-Me encantaría. Respondió Paul, agarrándole la mano para que entraran ahora mismo.

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En casa de Sarah, Mía, Ringo, George y hasta Victoria, se encontraban cenando, mientras hablaban sobre el nuevo proyecto de los Beatles. Victoria se sentía un poco incomoda, pero después de que Sarah le insistiera tanto para que se quedara, prefirió aceptar, después de todo, hasta los chicos eran más agradables de lo que pensó antes.

-¿Y a ti que tipo de música te gusta Victoria?. Le pregunto Ringo a la chica, ya que estaban hablando de ese tema y ella no había dicho nada todavía

-Me gusta de todo un poco, pero esa música que está ayudando a que surja una nueva moda, creo que se llama Mod, me gusta

-A mi también, me gusta cómo se están vistiendo las chicas que siguen eso. Dijo Sarah, feliz de escuchar que Victoria podría ser más parecida a ella de lo que pensaba

 -Las modas son extrañas. Comento Mía, sin despegar su mirada del plato. –Aunque a la vez muy interesantes-

 -Se reirían de nosotras si saliéramos con esas faldas que usábamos hace 8 años

-Yo casi no las usaba. Le contesto Mía a su hermana, recordando los tiempos en que era más atrevida que antes

-Cierto, Mía siempre usaba faldas más cortas, Dijo George, interviniendo en la conversación

-Me están dejando como una puta frente a Victoria. Mascullo Mía, mirando con preocupación a la chica que estaba al otro extremo de la mesa, riendo un poco por su comentario

-No eras para nada así, pero llevabas a los chicos de cabeza, incluyendo Paul. Le dijo George, sirviéndose por segunda vez el espagueti que estaba en el centro de la mesa

 -Sí, me acuerdo……….

Sonrió un poco al recordar esos tiempos, en que era más divertida que antes y no tenía tantas responsabilidad como ahora. Ojala esos tiempos volvieran, pensó mientras todos comenzaron a hablar de otra y de nuevo con una sonrisa, miraba con cuidado como George volvía a ver tanto a Victoria.

-Creo que ya es hora de que me vaya. Informo Victoria, mirando su reloj

-¿Tan pronto?. Le pregunto Sarah, sobresaltada

-Ya es un poco tarde y debo estudiar. Le respondió la chica muy apenada

-¿Viniste en auto?. Le pregunto esta vez George, dejando su plato de lado

-No, pero tratare de conseguir un taxi aquí afuera. Le contesto la chica, levantándose de su lugar

-Si quieres yo te acompaño, Ringo todavía no se va pero yo sí. Le dijo George, también levantándose

-No, no hace falta, gracias

-Vamos Victoria, George no muerde. Le dijo Sarah a la chica entre risas

-Está bien, vamos……………..

Sarah tenía razón, nada malo pasaría si se iba con él, aparte de que le caía muy bien e iban en auto por lo que nadie los vería juntos, así que, ¿Qué tenía que perder si no aceptaba?.....

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Un rato más tarde, cuantos Ringo también se fue, dejando a Mía y Sarah de nuevo solas en el departamento junto a Isabelle. Las chicas aprovecharon para ponerse a ver televisión y esperar a que a la niña le diera sueño y a ellas también, nadie tenía horario para dormir en ese lugar, en realidad, no había horarios para nada y eso de cierta forma hasta les divertía, ya que en el resto de las casas si era así. Sin embargo, cuando pensaron que ya nadie más llegaría, se equivocaron porque ahí estaba el timbre sonando insistentemente, haciendo que Mía se fuera a abrir con cara de pocos amigos.

-Paul, hola. Saludo la chica, cambiando su semblante apenas vio que era el

-Hola Mía. Saludo Paul, el sí con un semblante bastante serio

-No sabía que venias. ¿Pasa algo?

-Necesito hablar contigo, en privado. Le respondió el chico, haciendo que Mía se pusiera algo preocupada

-Si está bien, entra

En la sala, Sarah los vio llegar juntos bastante extrañada, no obstante, apenas vio como su hermana le decía con la mirada que se fuera para la habitación junto con Isabelle, obedeció de inmediato, dejándolos solos.

-Yo no sé cómo decirte esto Mía. Comenzó a decir Paul, soltando un bufido

-Vamos Paul, di lo que tengas que decirme, no importa lo que sea

-¿Quién es el padre de Isabelle?. Le pregunto él, mirándola a los ojos fríamente

Mía se quedo mirándolo también, pero nerviosa, ya que no esperaba esa pregunta y mucho menos de él….

-¿Lo conozco?. Volvió a preguntar Paul, viendo como la chica comenzaba a moverse insistentemente. Un signo de que estaba bastante nerviosa

-¿Por qué preguntas eso?

-¿Me vas a responder o no?

-Es mi problema, ¿no crees?

-¿Me vas a responder o no?. Le volvió a preguntar Paul, insistente

-¿De verdad quieres saberlo?

-Supuestamente soy yo, ¿no?. No hace falta que me lo digas, ya lo sé, pero yo sé que es mentira, que es un invento tuyo 

-¿De qué hablas?

-No toleras verme feliz, viviendo mi propia vida, quieres hacerme la vida imposible como desde que tengo 14 años los has hecho

-Paul, no digas tonterías

-Es la verdad. Mascullo el chico, un poco molesto

-No, que yo no te correspondiera como se debía, no quiere decir que te estaba haciendo la vida imposible

-Pues lo hiciste y ahora quieres hacerlo con esa historia barata. Pero no Mía, esta vez la balanza esta de mi lado y no voy a dejar que arruines mi vida, no mas

-Paul, lo siento. Dijo Mía, con los ojos llorosos. -¿Quién te lo dijo?-

-John, el me lo dijo, pero también sé que todo es un chisme que tu inventaste para molestarme 

-No Paul, no es ningún chisme o invento, es la verdad, me embarazaste aquella vez en Paris

-No, es imposible, tú siempre te metías con chicos, con muchos, cualquiera puede ser el padre. Le dijo el negando otra vez con la cabeza

-Paul, créeme, eres tú, todo coincide con ese encuentro

-No Mía, no, no, no. Déjame en paz, ¿quieres?

Vio como Paul se iba, apresurado y tiraba la puerta tras de sí apenas salió. Mía, no se pudo resistir mas y comenzando a llorar, se sentó al lado del sillón, deseando que nada de eso hubiera pasado o que John no le haya contado nada y todo siguiera normal, como desde hace 2 años venia siéndolo….

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El tráfico, que los tenia atrapados, en medio de esa calle congestionada, los envolvía en un silencio que ninguno de los 2 jamás experimento. Victoria era un poco tímida, George también, así que ahí estaban mirando por sus ventanillas los autos que tenia al lado, sin ni siquiera mirarse.

-Creo que fue una mala idea venirme por aquí. Dijo George, desesperándose

-No te preocupes, no es tu culpa. Le contesto la chica, despejando la mirada de la ventanilla

-Debe de ser un accidente o algo por el estilo

-Igual Londres es así

-¿Quieres que suba el radio?. Le pregunto el chico, volviendo a ver el aparato

-Sí, está bien. Respondió Victoria, por fin más tranquila

A esas horas, la música que pasaban era la mejor y George lo tenía muy claro, por lo que al sintonizar su emisora favorita, subió el radio lo mas que pudo, por la canción que estaban pasando, que era una de sus favoritas.

-Esa es mi canción favorita. Comento la chica, poniéndose a cantar casi en el acto

-A mí también me gusta mucho. Le dijo George, con una gran sonrisa

George también se sabía la canción de memoria, por lo que se puso a cantar con la chica, a la vez que ambos soltaban risas tímidas, hasta que termino la canción y soltaron una risotada, divertidos con toda esa situación.

-No sabía que te gustaba Ray Charles. Le dijo George, todavía riendo

 -Me gusta, es genial

-Lo sé, tiene canciones muy buenas

-A casi nadie de mi edad le gusta. Comento Victoria, sacando un cigarrillo de su bolso

-¿Fumas?. Le pregunto George extrañado

-Si, a veces. Le respondió ella, a la vez que lo encendía. –Espero que no te importe que fume aquí en tu auto-

-No para nada, yo lo hago todo el tiempo. Le contesto el chico, observando como ella le ofrecía uno

 Lo acepto con gusto, a la vez que seguía mirándola con cautela. Victoria, era la chica más interesante y parecida a el que había conocido hasta el momento y eso le interesaba muchísimo.

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Mía lloraba en los regazos de su hermana, como desde hace muchos no hacía. Le había dolido todo lo que Paul le dijo y no podía evitar desahogarse con la única persona que podía llegar a entenderla en todo el mundo.

-Es un imbécil, como no te va a creer si es tan obvio. Le dijo Sarah, consolándola

-Me odia Sarah

-No, el jamás te va a odiar, lo que pasa es que esta aturdido con todo ese asunto

-El maldito de John se lo dijo. Mascullo Mía enojándose, mientras se incorporaba

-¿Y cómo lo supo él?. Le pregunto Sarah con el ceño fruncido

-No lo sé, la única cercana a el que lo sabe, es Cyn

-Cynthia, fue ella. Exclamo Sarah, muy enojada. – Pero me va a oír-

-¿Qué harás?. Le pregunto Mía confundida, limpiándose las lagrimas

-La voy a llamar

Sarah, hizo venir a Cynthia de inmediato, apenas la chica negó una y mil veces habérselo contado a John. La chica se sentía tan apenada con todo eso, que 20 minutos después ahí estaba en la sala, junto con Mía y Sarah, jurándoles que en serio no le había contado nada.

-¿Y cómo lo descubrió entonces?. Le pregunto Sarah, dudosa

-No sé, aunque……….

-¿Qué?.Le preguntaron las 2 chicas al mismo tiempo

-El venia sospechando y más bien me extraño que después ya no me volviera a decir nada sobre eso

-¿Venia sospechando sobre la paternidad de Paul?. Le pregunto Mía, confundida

-Sí, me venía preguntando cosas sobre eso, como quien era el padre de la niña y cosas así

-Entonces lo investigo, maldito Lennon

-De todos modos, ya era hora de que se supiera Mía. Trato de decirle Sarah, al ver que ella se estaba poniendo muy enojada con todo eso

-Ni siquiera me creyo

-Eso lo veremos. Le dijo la chica, encaminándose a su habitación

Saco un paquete sellado que tenía guardado en uno de sus cajones y volvió a salir, dirigiéndose a la puerta principal, frente a una Cyn y Mia confundidas, que ni siquiera tuvieron oportunidad de preguntarle donde iba, por lo rápido que hizo todo eso. Sarah, iba a ir a la casa de Paul, tenia que hablar con él, no importándole si ya era muy tarde

Minutos después, de que el taxi que se encontró con suerte frente a su edificio, llegara a la casa de los Asher, llego corriendo a la puerta, sosteniendo el paquete fuertemente. En otras ocasiones, estaría muy apenada de estar ahí tan tarde, pero ahora no le importaba nada, ni siquiera cuando al tocar el timbre, fue el propio Paul el que abrió.

-Sarah

-Hola Paul, seguro te estarás preguntando que hago aquí

-Si, en realidad eso te iba a preguntar

-Tenemos que hablar seriamente

-Sarah, ya se dé que vas a querer hablar y la verdad es que no me apetece tocar ese tema otra vez

-Si alguna vez quisiste a Mía de verdad, déjame hablar contigo Paul, por favor

Al ver que la chica insistía, no tuvo más opción que  dejarla pasar y llevarla hasta la biblioteca: el lugar más privado de la casa. Todos ya dormían y Paul lo único que esperaba era que la conversación fuera rápida.

-Sé lo que paso hace un rato

-Sí, me imagino

-Paul, las cosas no son como crees

-Ya sabía que venias a convencerme

-Tú no eres así

-También tengo derecho a enojarme algunas veces

-Pero no con cosas que no son

-¿Qué quieres decir con eso?

-Yo no vine a convencerte con nada, de hecho, yo ya sabía que cuando lo supieras lo ibas a negar, así que aquí te dejo esto, espero que te ayude a aclarar tu mente. Le dijo la chica, dejando el paquete en la mesa que tenían al frente, antes de pararse, lista para irse de ahí

-¿Qué es?. Le pregunto Paul, intrigado

-Todo lo que te has perdido, buenas noches Paul

Sarah se fue, dejándolo solo ahí en medio de esa inmensa biblioteca, a la vez que pensaba seriamente si abrir el paquete o no. No tenía idea que era, así que después de mirarlo fijamente por unos minutos, decidió abrirlo y averiguar de qué se trataba. Encontrándose de inmediato, con fotos y un diario, esto último, al parecer escrito por Mía en sus 9 meses de embarazo, las fotos también la mostraban en esa etapa y también a Isabelle en sus primeros meses y en su cumpleaños número 2, donde salía de frente sonriendo con un hermoso vestido. Esta ultima foto fue la que más dejo frente a sus ojos, descubriendo con cada minuto y segundo que pasaba que la niña si podía ser su hija y que al final si le dejo a Mía una gran parte de su corazón.

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Lo prometido es deuda y aqui esta el capitulo que dije que publicaria rapido si comentaban rapido, cosa que hicieron ;) de hecho, gracias a todas por sus comentarios, con todos me rei un monton XD perdon si la mayor parte de este ultimo capitulo se dedico mucho a ese tema de la paternidad de Paul, solo estaba inspirada para eso jajajajajajajajaja ademas, me la pase toda la tarde escribiendolo, con un gran calor encima, mientras comia, escuchaba a Ray Charles, veia videos en Youtube, miraba facebook, hablaba con mi mamá, tomaba cafe, le mentaba la madre a los malditos vecinos del frente que pasan tirando piedras, le rezaba a McCartney para que ya no tiemble mas , me quedaba un rato pensando en que escribir luego y bueno, hice de todo mientras lo escribia asi que estos son los resultados, ojala les haya gustado, espero sus comentarios y cualquier opinion, queja o hasta idea es bien recibida ;) saludos 

Capitulo 15

¿Dilema?, podría ser, pero confundido definitivamente si lo estaba. Con solo saber que su padre lo estaba buscando quien sabe para qué, lo llenaba de coraje pero a la vez de intriga, aunque su orgullo siempre estuviera adelante y ahí se encontraba, frente a un Brian que trataba de convencerlo ya que el día de la reunión había por fin llegado.

-John, la reunión podrá durar el tiempo que quieras. Tampoco es necesario que te quedes horas con el

-No estoy interesado Brian

-¿Sabes qué pasaría si la prensa se entera de todo esto?. Le pregunto Brian ya cansado con todo eso

-Me importa un carajo la prensa, ¿sabías?

En esos momentos Ringo y George entraron a la sala, sin imaginarse que estaban interrumpiendo la conversación, o de que John se encontraba molesto…..

-Tengo una idea. Exclamo Brian, después de unos minutos de silencio en los que John se dedico a comer una manzana y los demas a leer el periódico y comer algo

-¿Y ahora qué?. Le pregunto John con la boca llena, bastante fastidiado

-Ringo y George nos acompañaran, así te podrás sentir mas cómodo, ¿Qué dices?

Los chicos, que seguían sin tener idea de nada, volvieron a ver a Brian contrariados y confundidos. Ya habian escuchado días antes el tema de la reunión con el padre de John, pero nunca pensaron que estaban hablando de eso cuando llegaron.

-No, ellos no irán. Contesto John, parándose del sillón de inmediato

-¿A dónde no iremos?. Pregunto George, todavía confundido

-A ver a mi padre, Brian nos arreglo una reunión

-¿Tu padre?. Volvió a preguntar George aun más confundido. – Pero yo pensé…..-

-Sí, se desapareció un montón de años pero al parecer ha regresado, seguro por dinero. Le dijo John, harto de contar lo mismo por días

Todos se quedaron callados de nuevo, mirando a John que seguía molesto y a punto de gritarle a alguien si le decían algo más.  Hasta que Ringo lo pensó un poco y no le pareció tan mala idea, la anterior ocurrencia de Brian.

-Pues la verdad me parece bien que George y yo los acompañemos, así el ambiente no estaría tan pesado

-Bien, ¿Qué dices George?

-A mí también me parece bien. Contesto el chico, que observaba a John mirando por la ventana mientras fumaba un cigarrillo

-Perfecto, entonces John, los chicos te acompañaran, ¿Qué dices?

John se quedo pensativo unos segundos, que tanto a él como a los demas, se les hizo eternos. Tenía muchos sentimientos encontrados, saber que su padre quería volver a ver no era fácil, le daba un poco de desconfianza y simplemente no tenía idea de que quería. No obstante, al volver su mirada hacia sus amigos, que estaban ahí sentados observándolo, pensó esta vez que no sería tan mala idea y que quizás así se lo quitaría de encima rápido y no habría ningún escándalo.

-Está bien, iré. Contesto John, soltando un bufido poco después

-Entonces prepárense que falta una hora. Les dijo Brian, antes de salir por la puerta

Quizás, para John también era hora enfrentar su pasado…….

………………………………………………………………….

Desde el beso que no le hablaba, ni siquiera le dirigía la mirada y el aunque actuaba un poco insistente, prefirió dejar que se tranquilizara, aunque de verdad Mía le gustara cada vez mas…..

-¿Paso algo entre Thomas y tú?. Le pregunto Leonor a Mía muy extrañada

-No paso nada. Se limito a responderle la chica con una sonrisa falsa

-¿Estás segura?, ni siquiera se vuelven a ver

-Hay mucho trabajo Leonor, ahora si me disculpas….

Mía se levanto de la silla, dirigiéndose de inmediato al baño de mujeres, el único lugar donde podía estar sola y pensar. Odiaba a los chismosos y que ya estuvieran sospechando algo entre ella y Thomas, le comenzaba a preocupar. Sin embargo, cuando ya iba por la mitad del camino, vio como alguien se interponía en su camino, rodando los ojos al darse cuenta de quien se trataba.

-¿Y ahora que quieres?

-Leonor, te pregunto algo sobre nosotros, ¿cierto?. Le pregunto Thomas, igualmente preocupado

-Sí, está un poco extrañada de que ni nos volvamos a ver

-Es tan chismosa. Mascullo el chico, muy molesto

-Si no hubieras hecho lo que hiciste, esto no estuviera pasando. Le dijo Mía, comenzando a caminar otra vez

-¿Vas a estar enojada conmigo toda la vida?. Le pregunto de nuevo Thomas en un grito, cuando ya la chica iba algo lejos

Mía, paro en medio pasillo, para voltearse y verlo ahí parado, esperando una respuesta inmediata. Todavía no le había dado explicaciones por lo del beso, no obstante, ahí mismo pudo deducir algo por la forma en que comenzó a mirarla……..

-Quien sabe, si ya no te sigues tan atrevido…….

-Lo sabía, no te resistes a mis encantos. Le dijo el chico, al acercarse de inmediato cuando escucho su respuesta

-Eres un tonto Thomas

-Y tu una chica encantadora. Susurro el chico, sonrojando a Mía casi en el acto

-¿Qué pretendes?. Le pregunto Mía, entre cerrando los ojos

-Eso no te lo diré ahora, nos vemos. Respondió Thomas, alejándose igual de rápido que como se alejo

………………………………………………………………………

Caminaba por la habitación ansiosa y desesperada, muy desesperada, muy pronto recibiría la llamada de Christopher, muy pronto,  por fin podría comenzar con su plan……

-Laisy, te llaman. Grito su madre desde las escaleras

-Ya voy. Mascullo la chica, saliendo de su habitación corriendo

Apenas llego al teléfono, respiro profundo y comenzó a hablar con él, que al parecer le tenía muy buenas noticias, mejores que las que ella pensaba….

-¿Y averiguaste donde vive?. Le pregunto la chica insistente

-Sí, vive en Mayfair, en la calle Albemarle. ¿Tienes un papel para que apuntes la dirección exacta?

-Sí, si aquí tengo uno. Le contesto Laisy rápidamente

Al terminar de apuntar todo, se sintió mucho más tranquila, siempre supo que Christopher no le fallaría pero jamás pensó que trabajaba tan rápido, algo que agradeció de inmediato.

-Muy pronto te llegara el dinero, gracias Chris

-No hay de que, espero que no hagas alguna estupidez

-Tranquilo, no hare nada de eso

-Mas te vale Laisy, no te quiero ver en la cárcel

-Adiós Chris. Se despidió la chica, colgando sin esperar una despedida de parte de el

Subió de nuevo a su habitación, muy feliz de tener ya la dirección del departamento de Sarah. Se vengaría y con lo que más le pudiera doler a una chica enamorada, una infidelidad, la misma que realizo Ringo con ella misma hace poco tiempo y esta vez una cosa la ayudaría: una foto comprometedora donde salía con él, justamente la misma noche que pasó todo. Estaba segura que con eso los separaría fácilmente……..

………………………………………………………….

Llegaron a la oficina de la empresa de Brian, poco tiempo después de la hora acordada. John no quería mostrar ningún interés y llegar impuntual era una de las maneras de demostrarlo. Entraron al lugar, encontrándose con el hombre y un periodista, esto último extrañando mucho a John y a los demas puesto que se suponía que era algo privado.

-¿Qué quieres?. Le pregunto John a su padre apenas se acerco a el

-John, yo solo quería verte. Le contesto el hombre con una sonrisa marcada en los labios

-¿Por qué trajiste un periodista?. Volvió a preguntarle a John, mirando de reojo al tipo que estaba detrás de su padre

-Pues……

-Mejor no digas nada, ya mucho me has dicho trayéndolo. Le dijo John interrumpiéndolo, cortante

George y Ringo se sentaron en un sillón cercano, junto con Brian que esperaba que todo saliera bien. John era capaz de muchas cosas y ahora con un periodista ahí, si o si todo tenía que salir bien.

-¿Cómo te ha ido con todo?. Le pregunto Alfred cuando se sentaron frente a frente

-Bien, si muy bien. Le respondió John, desinteresado con la conversación

-Te he extrañado mucho John.

-Aja

-John, se que puede ser que estés enojado conmigo pero………

-Ya conoces a Ringo y George, ¿cierto?. Le pregunto John, tratando de no hablar sobre ese tema

-Es un gusto Señor Lennon. Se presento George extendiéndole la mano

-El gusto es mío joven

-Y el es Ringo. Le dijo John, presentando a su amigo

-Mucho gusto. Le dijo Ringo extendiéndole la mano

-Mucho gusto Ringo

Después de eso, se quedaron en un silencio incomodo, en donde John se dedico a mirar a su padre y evitar recordar los recuerdos que compartía con él, recuerdos que muchas veces los atormentaban………

-¿Estás seguro que solo me buscaste para verme?, ¿o solo quieres dinero?

-John, por favor. Le dijo Brian al chico, seriamente

-¿Qué?, es la verdad. ¿Qué quieres?

-Hay muchas cosas que todavía no entiendes John. Le contesto el hombre tranquilamente

-Y tu, muchas cosas que no sabes. Me largo

-John. Trato de llamarlo, parándose del sillón

-Vamos chicos. Les dijo John a los demas, listo para irse de ahí

Ringo y George obedecieron, siguiendo a John por la salida casi en el acto. Brian los siguió después, de disculparse de Alfred y hablar con el periodista por aparte para que no publicara la historia, llegando a chantajearlo con otras cosas sobre ellos que podía publicar, al final el hombre estuvo de acuerdo y se fue, ahora solo ya que el padre de John ya había salido, un poco decepcionado por el mal encuentro que tuvo con su hijo.

………………………………………………………………………

Mía entro al restaurante, dispuesta a comenzar su hora libre de almuerzo. Casi nunca la tomaba pero ese día prefirió salir de esa oficina tan monótona, para distraerse y no ver más a Thomas. No obstante, al entrar al lugar, jamás se imagino encontrarse con alguien conocido, muy conocido……

-Mía, que gusto verte de nuevo. Le dijo Paul que venía con Jane saliendo del lugar, apenas se encontraron de frente

-Paul, vaya, igualmente. Le contesto la chica con una sonrisa amable

-Te presento a mi novia Jane….

Su novia, si la que venía con él era su novia y bueno, ¿Quién mas iba a ser?, si venían agarrados de la mano, esto último Mía notándolo hasta ahora cuando dirigió su mirada hacia las 2 manos entrelazadas y luego la alzo para ver a la chica, muy hermosa sea dicho de paso.

-Jane, mucho gusto, yo soy Mía Robinson. Se presento la chica seria, después de habérsele borrando su sonrisa

-Así que tu eres Mía, Paul me ha hablado mucho sobre ti. Dijo Jane, haciendo que Mía se pusiera más seria aun

-¿Ah sí?, que bien

-Jane y yo somos novios desde casi un año. Le explico Paul a la chica, mientras miraba a Jane con ojos de amor

-Los felicito, hacen muy bonita pareja…….

Ver a Paul con una novia, tan hermosa y agradable, la hacía sentir un poco rara y también incomodo. El chico estuvo tan enamorado de ella por tanto tiempo, que el hecho de ahora verlo con alguien más, tan feliz y enamorado, le era difícil de asimilar y hasta de reconocer.

-Bueno, ya debemos irnos

-Realmente fue un gusto en conocerte Mía. Le dijo Jane a la chica, extendiéndole la mano

-Igualmente Jane, que les vaya bien

-Nos vemos

Los 2 se alejaron de inmediato, todavía con sus manos entre lazadas mientras se dedicaban una sonrisa. Mía se volteo para verlos salir por la puerta, tratando de asimilar por fin de lo que recién descubría, no sabía que Paul tenia novia y ahora allí parada, sintiendo un poco de tristeza sin saber porque, salió del restaurante corriendo, como si estuviera huyendo de algo, a la vez que una lagrima bajaba por su mejilla. ¿Acaso estaba celosa?, ¿acaso era una egoísta?, ¿o acaso por fin se daba cuenta que fue una tonta en rechazar a Paul tantas veces?

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Después de acompañar a John, a la reunión con su padre y de ver su trabajo terminado por ese día. Decidió ir al departamento de Sarah, últimamente estaba yendo casi seguido, cosa que no hacía antes o en realidad nunca hasta ahora…..

-George, hola de nuevo. Lo saludo Victoria apenas abrió la puerta

-Hola Victoria, ¿Cómo estás?

-Oh muy bien, pasa. Le respondió la chica, mientras observaba como el pasaba al departamento rápidamente. –Sarah no está-

-Ah no, yo……. Yo…… necesitaba hablar con ella. Balbuceo George, nervioso

-Si quieres, la esperas. Dijo la chica, incomoda

-Sí, estaría bien

Para Victoria era tan raro verlo ahí de nuevo, con la misma excusa de que necesitaba hablar con Sarah o Mía. Pero mejor decidió no pensar más en eso y ofrecerle algo de tomar, después de todo, la cortesía debía ir primero.

-¿Quieres te o algo así?. Le pregunto Victoria, amablemente

-Me gustaría agua. Respondió George observando como la chica se iba directamente a la cocina

Le entrego el vaso de agua, apenas regreso de la cocina. Indecisa ya que no sabía si quedarse a hacerle compañía o ir a ver qué estaba haciendo la niña.

-Si quieres te sientas, no me molestaría en lo absoluto. Le dijo George, señalando el sillón que se encontraba a su lado

-No me gustaría molestarlo, ¿sabe?

-Para nada, en realidad, lo que más me apetece es comenzar una conversación con alguien

-Ahhh. Contesto Victoria, tímida

-¿Estudias?. Pregunto el chico, interesado en saber más sobre ella

-Sí, psicología

-Que interesante, debes de ser una chica muy inteligente

-Quien sabe, nunca me he puesto a pensar en eso

-¿Y desde cuando trabajas aquí?

-Oh desde hace muy poco en realidad

-Espero que no te molesten demasiado

-En realidad, Mía y Sara son muy amables conmigo

-Lo sé, ellas son chicas muy simpáticas y accesibles, solo lo decía en broma

-¿Las conoce desde hace mucho?. Le pregunto Victoria, intrigada

-Desde que tengo como 13 años, los 4 somos amigos de ellas desde hace muchos años

-Vaya no sabía que ellas trataban con ustedes

-¿Te molesta?

-No, para nada

George se quedo mirándola a los ojos, con la sonrisa que tanto lo caracterizaba. La chica era muy hermosa e interesante, con una personalidad que le atraía mucho, sobre todo porque también era la primera chica fuera de la farándula, que no se le tiraba encima y tratar con gente no famosa le gustaba todavía más, mucho más…….

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En la noche, Paul llego a casa de John, para compartirle algunas ideas para el nuevo disco y visitarlo también. El chico sentía que John por alguna razón necesitaba compañía después de haberse encontrado con su padre y ahí estaba, en el jardín junto a él, mientras jugaba con Julian y hablaban sobre ese tema.

-Entonces no salió nada bien

-No. Le respondió John, todavía desinteresado

-Pero es tu padre John, ¿vas a ocultarte de él toda la vida?

-Se fue cuando era un niño Paul y nunca me busco mas, no crees que sea una casualidad que ahora que soy famoso decida buscarme

-Puede ser que eso lo ayudo a encontrarte

John se quedo callado, después de escuchar esto último que dijo Paul. Quizás tenía razón pero por el momento ya no quería seguir pensando en ese encuentro. Sobre todo porque al mirar a su amigo jugar con Julian como si fuera su padre, le recordaba lo que descubrió aquel día y no sabía si decírselo o no…..

-Yo solo dijo que, le hubieras dado una oportunidad. Le dijo Paul, comenzando con el tema de conversación otra vez para convencerlo

-¿Y quién eres tú para decirme lo que tengo que hacer o no?. Le pregunto John, comenzando a molestarse con la insistencia del chico

-Soy tu amigo John

-Y el menos indicado para decirme esas cosas

-¿Qué quieres decir con eso?. Le pregunto Paul con el ceño fruncido

-Vamos Paul, podrás ser el santo frente a las fans y la prensa pero tu vida privada es un desastre muchas veces. Respondió John casi en un grito, mientras se paraba de su silla

-¿Cómo?. Volvió a preguntar Paul molesto, parándose también para ponerse a su nivel

-Tú no eres quien para aconsejarme si debo darle una oportunidad a mi padre o no

-Actuaste mal y estoy tratando de quitarte esa venda de los ojos, deberías de dejar el rencor de lado y dejar el pasado atrás también

-¿Qué yo actué mal?. Pregunto John, listo para darle un golpe a Paul. –Le pasas siendo infiel a Jane, casi no vas a ver a tu familia…………

-A ti no te importa mi vida John. Lo corto Paul, ya bastante molesto con esa discusión

-Entonces no te metas en mis asuntos, si eres el padre de la hija de Mía y ni la has reconocido todavía………………….

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Y ENTONCES LA BOMBA EXPLOTO BUMMMMMMMMMMMMMMMM
INTRIGA INTRIGA INTRIGA MUAJAJAJAJAJA SI QUIEREN SABER QUE PASA COMENTEN RAPIDO PARA PUBLICAR PRONTO ;)  CHAITO